Pese a los inconvenientes causados en otros sectores provinciales, la lluvia de los últimos días vino bien para el dique Caracoles que recibió un aporte extraordinario de agua y pudo embalsar, algo que no hacía desde septiembre pasado, según explicó ayer el Gobierno, a través del departamento de Hidráulica. Con los caudales extra que aportaron principalmente las precipitaciones, desde el 13 de enero pasado e ininterrumpidamente, fue aumentando primero centímetros, y luego metros su caudal en forma diaria (ver infografía) y hasta ayer había subido casi 12 metros sobre el nivel del mar elevando su cota a los 1046,49 msnm (metros sobre el nivel del mar), según datos oficiales. “Tal vez, con razón, hoy no se valore pero créanme es una bendición para el resto del año”, dijo el gobernador Gioja, destacando el lado bueno que trajo la lluvia, cuando transcurre el tercer año consecutivo de sequía.
Un dato a destacar es que no sólo ha detenido su caída y la elevó, sino que además por estos días el agua que está sacando Hidráulica del dique Caracoles, para cubrir las necesidades de riego y consumo de la provincia, es menor a la que trae el río San Juan, algo que también había dejado de ocurrir desde septiembre pasado. Las cifras oficiales indican que el pasado 12 de enero la cota de la presa llegó a los 1034,98 msnm, el peor registro desde que se inauguró en el 2009. Pero a partir de ese momento en que aparecieron las precipitaciones inusuales se revirtió la situación, el caudal del río creció y empezó a entrar más agua a la represa que la que salía, por lo que luego de 134 días pudo guardar algo de agua.
Crecimiento:
En los últimos 12 días la cota creció 11,51 metros y se ubicó en los actuales 1046,49, prácticamente el mismo registro del 28 de diciembre pasado. “O sea, se recuperó todo lo que había perdido de agua en lo que va de enero”, celebró ayer Gioja. El promedio de agua que estaba ingresando diariamente a la presa desde diciembre era de 30 a 31 m3/s (metros cúbicos por segundo), y a partir del 13 empezaron a entrar arriba de 40 m3/s y en los últimos cinco días, se elevó a un promedio de 80 m3/s, cuando lo que se está erogando de agua para regar y consumir es de 50 m3/s. “Estábamos erogando más agua de lo que entraba, ahora es al revés”, dijo ayer Jorge Millón, el titular de Hidráulica. El funcionario agregó que si bien haber crecido 12 metros “es mucho en altura, no lo es tanto en volumen, por el hecho de que el embalse está muy bajo. Mejoró mucho”. Millón opinó que influirán también las nevadas producidas en las últimas semanas en la cordillera: “creemos que con las nevadas, la rotura de la laguna de Santa Cruz y las lluvias se podrá mantener un caudal de 50 m3/s. De todos modos necesitamos un buen invierno para estar tranquilos”, advirtió.