Buenos Aires, 16 de septiembre.- En un escenario proclive para la pesificación de carteras de inversión como lo está demostrando la euforia que existe por los bonos en pesos, el dólar al público se mantuvo a 3,82 para la compra y 3,85 para la venta, pero con un mínimo de 3,845 en varias casas de cambio del microcentro.

Los operadores consultados reiteraron que la tendencia volvió a ser firme vendedora. "La inercia vendedora y el interés por tomar posición en moneda local presionan sobre el tipo de cambio", expresa uno de los informes más consulados en la "city" porteña.

En el mercado mayorista el billete estadounidense cerró a 3,8281 pesos y el tipo transferencia en 3,828, en un mercado que estuvo siempre supervisado por el Banco Central.

Para los analistas el nuevo escenario responde a varios factores, entre los que se señala el mejor clima externo y el deterioro que sufre la divisa estadounidense en el mundo e impulsa a los inversores a buscar otras oportunidades.

En las mesas de cambio se asegura que no son pocos los inversores que están desarmando posiciones dolarizadas. Algunos analistas arriesgan que si continúa la tendencia a la baja, algunos exportadores adelantarían sus liquidaciones para poder venderlas a un precio más caro.

La baja del dólar también se sintió en las operaciones a futuro, donde las caídas rondaron el 0,15 por ciento.

Los contratos que vencen a fin de octubre convalidaron un valor de 3,866 pesos por dólar, los de noviembre otro en 3,897, y para la última posición del año, diciembre, se ofreció 3,930 pesos.

"Los mercados muestran un panorama reluciente, con todas las variables reacomodándose de tal manera que los inversores vienen disfrutando esta semana de resultados altamente positivos", señaló un operador, al referirse al combo casi perfecto que muestra bonos y acciones en suba y como contrapartida al dólar y riesgo país en baja.

Por el lado de las tasas de interés, tanto pequeños como medianos ahorristas acceden por estos días a un rendimiento promedio del 1,04 por ciento mensual, equivalente al 12,84 anual, en el plazo de sesenta o más días.

La tasa Badlar -que pagan los bancos por depósitos de más de un millón de pesos a 30 días- presenta ínfimas variaciones ubicándose en 12,12 por ciento anual.

Por su parte, el Merval terminó 2,42 por ciento arriba en 1.977,41 unidades, para acumular ahora una ventaja del 10,97 por ciento en septiembre y ganar 83,15 en lo que va de 2009. De esta manera, el nivel del principal indicador bursátil se mantiene en los niveles más altos de los últimos catorce meses, mientras los papeles siguen ampliando rentabilidad.

Otra señal de que el mercado comenzó a desperezarse fue el volumen de los negocios al contabilizarse 64,10 millones de pesos, cuando en los peores momentos difícilmente se superaban los 30 millones.

Tenaris, la acción de la compañía de Techint, volvió a transformarse en la estrella del mercado, al ser la más operada -como viene ocurriendo desde hace tiempo- a tal punto que se llevó casi el 35 por ciento del volumen total operado en la jornada bursátil.

Los bonos también ampliaron sus ganancias, alentados los inversores por "un mejor panorama financiero tras el reciente canje de deuda", según interpretan los analistas más consultados.

Para los expertos el firme recorrido de los títulos corrobora la llegada de capitales frescos y de algunos inversores extranjeros, todo en medio de un proceso de cambio de portafolios potenciado por la pérdida de atractivo del dólar.

En la familia de los Boden los que tienen vencimiento en el año 2012 subieron 1,98 por ciento y los que tienen duración hasta 2013 crecieron 0,82.

Las dos modalidades de bonos a más largo plazo y que nacieron con el canje de la deuda registraron mejoras del 2,78 por ciento en el caso del Discount y de hasta 3,16 en el Par, pero lo mejor pasó por el cupón atado al PIB, con un salto del 5,55 por ciento.

Este repunte en la cotización de los bonos determinó una nueva baja en el "riego país", que se ubicó en 714 puntos básicos frente a los 749 de la víspera, según el índice EMBI+ del banco JP Morgan.

Los analistas del mercado evaluaron que los rendimientos locales están atrayendo a los inversores, y algunos anticipan una nueva "ola de compras" que beneficiaría a los bonos argentinos y de otros países del área.

A su vez en acciones, entre las once empresas líderes los mejores recorridos fueron para Aluar, 8,24; Tenaris, 3,48; Siderar, 2,54; Telecom, 2,33; Petobras local, 2,30; y Grupo Galicia que avanzó 1,82 por ciento.

En los informes bursátiles se vinculó el fuerte impulso de Aluar con la posibilidad de que la Corporación Financiera Internacional, el brazo del Banco Mundial para el financiamiento al sector privado, y otras entidades del exterior, reemplacen a la Anses como origen del fondeo para su ampliación de capital.

Con todo, y mientras muchos analistas vaticinan nuevas subas para los próximos días, otros creen que la toma de ganancias es inminente tras cosechar jugosas diferencias, de más del 20 por ciento en lo que va del mes cuando se trata de los títulos públicos.

Los rendimientos de los bonos argentinos son sumamente atractivos para los inversores que están a la caza de oportunidades. El Bogar 2018 rinde 18,30 por ciento, el Bonar 2015, 19,62 por ciento, el Boden 2012 en dólares, 13,89; y el Discount nominado en dólares promete un 12,60 por ciento.