En la sesión de ayer, la Legislatura provincial aprobó la prórroga de la Emergencia Hídrica en toda la Provincia de San Juan por el término de un año, a partir del 26 de noviembre. Entre otros puntos, la norma autoriza al Poder Ejecutivo a celebrar con la Nación convenios de asistencia financiera para realizar acciones y obras tendientes a prevenir los daños por la escasez de agua, y fomentar el uso racional del recurso hídrico.

 

El motivo de la decisión tiene lugar porque el pronóstico que todos los años elabora el Departamento de Hidráulica anticipa que la próxima temporada hídrica será seca y que el río San Juan traerá apenas 825 hm3, la mitad de agua que la media histórica que es de entre 1.500 a 1.700 hm3. Eso obligará a echar mano al agua almacenada en los diques para poder satisfacer la demanda que ronda los 1.000 hm3, y en esta ocasión se desembalsarán 180 hm3, es decir, el 18% del agua útil que tienen actualmente las reservas.

 

El dique que sacrificará ese volumen es Caracoles, ya que las autoridades decidieron preservar los espejos de agua de las represas Punta Negra y Ullum, ubicadas aguas abajo sobre el mismo cauce, para garantizar las actividades recreativas del verano.

 

La decisión se tomó en la comisión de regulación de embalses, que funciona bajo el paraguas de la Secretaría del Agua.