El intendente de Angaco, Carlos Maza, había solicitado que se lo habilite a utilizar el presupuesto 2023, el que no está aprobado por el Concejo Deliberante. Como fundamento, expuso que el municipio, por la inflación, ha agotado todos los recursos disponibles por la prórroga del de 2022 y, por ende, se encuentra "paralizado" al no contar con una herramienta que lo habilite a generar nuevos gastos. Incluso, indicó que, por esa falta, el mes pasado realizó una asamblea con los empleados, a los que les explicó "la delicada situación" que atraviesa la comuna, ya que, "las partidas más importantes, que se encuentran agotadas, son las de sueldos de todo el personal". Bajo ese fundamento, y ante el peligro de no contar con recursos para pagar salarios, la jueza del Contencioso Administrativo, Adriana Tettamanti, lo habilitó a aplicar el presupuesto 2023 en una resolución inédita, indicaron en Tribunales. Lo hizo a través de una medida cautelar, hasta que se resuelva la cuestión de fondo. Eso no es lo único, ya que el intendente denunció a los ediles ante la UFI Delitos Especiales por "incumplimiento de los deberes de funcionarios" al no tratar la norma que contiene los gastos e ingresos.

El presupuesto es clave para un Ejecutivo, ya que representa el conjunto de gastos e ingresos previstos para el ejercicio anual. Angaco no es el único distrito que no cuenta con un documento que lo habilite a gastar fondos. En esa misma situación se encuentra Rawson, mientras que un caso particular fue Iglesia, donde el Concejo aprobó el presupuesto 2023 recién a fines del mes pasado (ver recuadro).

El cruce entre Maza y los concejales se remonta a 2021, cuando uno de ellos, Claudio Palacio, quien era aliado, se distanció, lo que le costó al intendente perder la mayoría. Incluso, el edil fue nombrado presidente y, desde ese momento, Maza ha tenido problemas para tratar proyectos. Uno de ellos fue el presupuesto 2022, al que los ediles opositores le aplicaron cambios, por lo que Maza lo vetó parcialmente, dejando al Concejo Deliberante sin fondos para funcionamiento.

Sobre el presupuesto 2023, Maza lo presentó en noviembre del año pasado y, según denunció, hasta el momento no ha sido tratado, por lo que le solicitó a la Justicia, a través de un amparo, "que se ordene a los concejales y, en especial, a Claudio Palacio, para que en forma inmediata cumplan con su obligación pública, legal y constitucional de convocar a sesión ordinaria" para tratar el proyecto. Además, pidió una medida cautelar para que, mientras se resuelve ese planteo, pueda hacer uso de las proyecciones de gastos para este año, pedido al que Tettamanti le hizo lugar "máxime teniendo en consideración la naturaleza alimentaria y la protección constitucional de la que goza el salario y las remuneraciones de los trabajadores, que se encuentra comprometida", indica el fallo.

Consultado, Palacio fue muy crítico al manifestar que "en Argentina estamos así por este tipo de funcionarios y, por eso, Angaco le dijo que no a este intendente". También explicó que "hay partidas que él ha ido necesitando y se las hemos aprobado" y "siempre quiso manejar un presupuesto de acuerdo a sus caprichos". Además, dijo que "hemos aprobado partidas para sueldos". Sobre la denuncia penal, dijo que "va a utilizar argumentos para tratar de desviar la atención de su mala gestión. Debe ser el único caso en el país, de un intendente que busca cerrar un Concejo".

 

Insólita sesión
En mayo del 2021, los ediles opositores Claudio Palacio, Valeria Olivera y Natalia Marín, realizaron una sesión ordinaria en la plaza del departamento porque, dijeron, que no les habían dado lugar en la sala de sesiones.

Derrota electoral
En la elección del 14 de mayo, hubo que esperar hasta el escrutinio definitivo para saber quién era el intendente electo de Angaco. Por 79 votos de diferencia, el exjefe comunal, José Castro, le ganó la pulseada a Carlos Maza.

 

> Presupuesto de Rawson e Iglesia

La municipalidad de Rawson, que conduce Rubén García, cuenta con serias dificultades contables, ya que no tiene aprobado el presupuesto 2023. El Concejo Deliberante, con mayoría giojista, no aprobó el proyecto del jefe comunal, por lo que la comuna se debe regir con la prórroga de recursos y gastos del año pasado. El inconveniente, tal cual también se expuso en Angaco, es la inflación, por lo que, al mes pasado, se gastaron todos los fondos proyectados. Bajo ese escenario, para contar con fondos y poder destinarlos a distintas partidas, el Ejecutivo municipal necesita del OK del Concejo Deliberante. Un ejemplo de ello fue que los ediles rawsinos aprobaron la ampliación de partidas para aumentar los sueldos de los trabajadores comunales.

Un caso particular es el de Iglesia. A fines de julio, el intendente bloquista, Jorge Espejo, envió al Concejo Deliberante el proyecto de presupuesto 2023, esto es, siete meses después de iniciado el año. El único edil opositor José Luis Ponce, quien pertenece a Juntos por el Cambio (JxC), lanzó críticas contra Espejo porque, según explicó, no sólo no tuvo explicaciones de por qué el presupuesto se presentó tan tardíamente, sino que, en el mismo, se plasmaron obras y recursos "que ya estaban ejecutados".