Preocupación. En el sector farmacéutico sanjuanino advierten sobre los altos costos para mantener el sistema en funcionamiento.

 

Tras la corrida cambiaria del lunes y la fuerte devaluación del peso, los medicamentos sufrieron ayer un incremento de hasta un 15%, según dio a conocer el titular de la Asociación de Propietarios de San Juan, Carlos Otto. La preocupación en el sector es que frente a esa situación y como deben pagarles a los laboratorios a los 15 días y la Obra Social Provincia (OSP) y el PAMI les liquidan entre los 45 a los 60 días, no pueden afrontar el alto costo de la financiación. Por eso el dirigente advirtió que si no se acortan esos plazos pueden llegar a suspender las prestaciones y manejarse con el sistema de reintegros.

En otras palabras, el afiliado deberá abonar los remedios a la farmacia y pedirle, ya sea a la OSP o el PAMI, que les devuelvan el dinero.

Desde el Ministerio de Salud Pública dijeron que no había recibido comunicación sobre la posibilidad de que las farmacias pasen a manejarse por el sistema de reintegros y que iban a seguir de cerca la situación. El responsable del PAMI en San Juan, Julio Pascual, también se mostró sorprendido por la advertencia, pero aclaró que las prestaciones, al menos hasta ayer, se estaban cubriendo con normalidad.

La suba de los medicamentos, de entre un 7 al 15%, según el caso, es otra de las consecuencias del resultado de las PASO del domingo pasado, que provocó, entre otros efectos, una fuerte suba del dólar y que amenaza con apurar otra escalada inflacionaria.

Como todas las monodrogas con las que se fabrican los medicamentos son importadas, y se cotizan en dólares, al igual que el aluminio para fabricar los blisters, que viene del exterior, la suba de la divisa norteamericana no tardó en llegar. Todas las farmacias están conectadas a una base de datos, denominada manual farmacéutico, y cuando un laboratorio aplica un incremento inmediatamente se sube al sistema. Ayer la novedad fue la suba, luego de que el martes algunas droguerías comunicaran que había faltantes de stocks y que no podían asegurar el normal abastecimiento. Pero todo se normalizó ayer, cuando entraron en vigencia las nuevas subas.

Algunos ejemplos de incrementos fueron los de los antihipertensivos, que pasaron desde los 668,97 pesos a los 773,06 pesos (15,56%), un tranquilizante subió de 390,25 pesos a 430,09 pesos (10,21%) y un analgésico trepó de 165 pesos a 168,50 (2,12%).

En San Juan funcionan unas 250 farmacias y las ventas de estas dos obras sociales, la OSP y el PAMI, representan entre el 70 al 80% de la facturación en la provincia. Alrededor de un 10% corresponden al resto de las obras sociales y el otro 10% son operaciones de los clientes sin cobertura social y los artículos de perfumería, explicaron en el sector. Por eso la importancia del volumen de facturación de la OSP y del PAMI en las cuentas de los negocios del rubro.

No es la primera vez que hay tironeos entre el sector farmacéutico y las obras sociales por las fechas de pago pero, en la mayoría de los casos, en las negociaciones los problemas quedan solucionados y no se produce un perjuicio al afiliado.

En el caso de la OSP, según explicó Otto, el sistema es capitado, es decir que se paga un monto fijo. "Los precios con los que nos estamos manejando son de mayo por eso es urgente que se haga una actualización de la cápita", dijo el titular de la asociación que agrupa a los farmacéuticos sanjuaninos.

 

En el sector hablan de no poder financiar las compras por las tasas de interés. Estiman que sólo un 10% de las ventas son de pacientes que no tienen cobertura social.

En el sector hablan de no poder financiar las compras por las tasas de interés. Estiman que sólo un 10% de las ventas son de pacientes que no tienen cobertura social.

 

Preocupación en los sanatorios

 

Otro sector en el que están preocupados por la escalada inflacionaria y la suba del dólar es en el de las clínicas de la provincia. Desde la Asociación de Clínicas y Sanatorios, que agrupa a unas 30 instituciones, dijeron que muchos de los insumos que utilizan se cotizan en la moneda norteamericana porque lo que habrá impacto en los costos. Por ahora la atención es normal, dijeron, y sólo se están reprogramando, por ejemplo, algunas intervenciones quirúrgicas que demandan una prótesis importada, que por estos estos días no se consiguen.

El médico Carlos Buteler, del Sanatorio Argentino, sostuvo que "la suba del dólar nos afecta directamente y se traslada directamente al costo de la actividad".