A menos de tres meses de que se cierre el mandato Kirchner resurgen críticas en torno a la inflación que hizo trepar de manera importante los precios desde el 2003 hasta la actualidad. Para conocer la realidad de la suba, DIARIO DE CUYO salió a recorrer los supermercados y a comparar el valor de 15 alimentos, para evitar valores de un Indec que genera más dudas que certezas en la población, desde que fue intervenido en el 2007. Sin embargo, no sólo es importante el dinero que sale del bolsillo, sino también el que entra. Por esto, se suma al análisis el sueldo que tenía un empleado de comercio de maestranza, hace 12 años que era de $429, con lo que recibe el mismo trabajador en 2015, que trepó, según la Federación Argentina de Empleados de Comercio, a $9.907. Fue tomado este salario por representar a una gran cantidad de empleados y por ser un gremio que acuerda el monto con sus trabajadores anualmente.

De esta manera se reveló que si antes se necesitaba un 1,45% del sueldo para comprar un kilo de costeletas, por ejemplo, a $6,25, actualmente sólo se desembolsa el 0,79% del cobro mensual para abonar los $79 que cuestan ahora (ver infografía).

“Antes iba al supermercado con $100 y ahora no alcanza para nada”, es una frase que suelen lanzar con enojo los clientes en la fila para abonar las compras y no es mentira. Es que en 2003 con $34,12 se podían llevar los 15 artículos seleccionados para el sondeo y este año deben ir con $316,73 para poder hacer la misma compra. Sin embargo, la sorpresa está al analizar qué cantidad de su sueldo se invirtió para obtener esa compra, porque en 2003 se destinaba una porción mayor, ya que significaba el 7,95% y ahora se debe gastar sólo el 3,19% del total del cobro.

El producto que dio un salto mayor, entre la lista seleccionada, es el tomate, con un 1.512% más, porque hace 12 años costaba $1,55 y actualmente está a $25. De todas maneras, con esta hortaliza también se da que en este momento se le destina un bajo porcentaje del sueldo, 0,25%, a comparación del 0,36% que se le dedicaba antes. Detrás está el kilo de costeleta, con un aumento del 1.164% y completa el podio de los que más subieron, la banana, con un 1.041% más. Para este último artículo, la porción del recibo mensual que se destinaba era el 44%, y ahora representa el 22% del salario.

Uno de los productos más consumidos por los sanjuaninos, como es el vino, refleja una suba del 863%, porque en 2003 se podía conseguir 1 litro de vino común sólo con un billete de $2 ( $1,76), pero ahora se necesitan $16,95. Todo el que quisiera adquirir una caja de Tetra Brick, antes de la era kirchnerista, tenía que destinar el 0,41% de su ingreso mensual y ahora el 0,17%.

“Hay un proceso de suba sistemática de precios y eso el Gobierno lo acepta desde que pone una política de control de precios como es ‘precios cuidados’, sea eficiente o no. Si no habría inflación, no lanzan esa política de control”, explicó la economista Laura Rópolo. En cuanto a esta realidad, en la que suben los precios por un lado y disminuye el porcentaje del salario que se gasta por el otro, Rópolo expresó que, se pueden visualizar dos motivos, haciendo una lectura rápida: uno es que quizás se realizó un excelente trabajo de paritarias de los sindicalistas, para poder conseguir aumentos en el salario nominal o que dio buen resultado la política de “precios cuidados”. “Hay que ver los detalles de las mediciones, pero es lo que se puede analizar al obtener un aumento del poder adquisitivo mayor al aumento del gasto”, dijo la economista.