Los primeros precios que asoman en el mercado para la próxima cosecha de uva han causado gran disconformidad a los viñateros sanjuaninos y reflotado las quejas por abusos de "posición dominante" de los grandes jugadores del mercado. La mecha la encendió esta vez -y con bastante antelación respecto a otras temporadas- la cooperativa Fecovita, que envió un Whatsapp a lo viñateros locales con un ofrecimiento de compra de vino para exportar que incluye un adelanto de cosecha para la uva.
La empresa -uno de los grandes jugadores del mercado que definen los precios del sector- informa que para la próxima vendimia realizará una compra anticipada de vino por un cupo limitado (del 20% de la producción), por lo cual pagará 0,15 dólares (9,45 pesos) por cada litro de vino exportable.
Los productores sacaron rápidamente las cuentas y un litro de vino a ese precio significa un valor de 5 pesos el kilo de uva.
El aumento es del 25% respecto a los 4 pesos promedio por kilo de uva que recibieron los viñateros la temporada que pasó.
Al recibir una propuesta dolarizada, también hicieron cálculos con los vaivenes de la divisa: el año pasado cuando recibieron los 3,5 pesos, el dólar estaba a 19 pesos. Ahora que les ofertan 5 pesos, la divisa verde esta a 63 pesos.
De este modo, las cuentas no cierran para un sector que a diferencia de la soja u otros cultivos, no puede volcarse en el mismo año hacia otro cultivo cuando los precios vienen mal. La flexibilidad de este tipo casi no existe si se trata de la vitivinicultura.
""Esto es un abuso más de posición dominante" se quejó Eduardo Garces, presidente de la Federación de Viñateros. La dominación, explica, es porque hay pocas empresas en el mercado que demandan uvas para vino o mosto, se abusan de esa posición y pretenden pagar a los productores que le proveen su materia prima a precios bajos, sin contemplar los aumentos por inflación y costos. ""La uva debe valer 20 o 22 centavos de dólar" reclamó Garces, cuya entidad interpuso una denuncia contra la industria del mosto de Abuso de Posición Dominante, ante la Dirección de Comercio Exterior y a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, por el mismo motivo que ahora: los precios bajos que ofrece la industria.
""No lo aceptamos, es muy poco. Las expectativas son totalmente distintas", disparó Juan José Ramos, presidente de la Asociación de Viñateros Independientes, quien hace unas semanas viene insistiendo que el precio del kilo de uva para la próxima cosecha debe rondar los 12 pesos. ""¿Cómo pretenden pagar tan poco cuando saben que en el mundo va a faltar uva, que hay menor producción en Europa, se cosechara menos en Chile y ayer el granizo afectó viñedos productivos en el Valle de Uco, en Mendoza?", cuestionó el viñatero. Para Ramos "no puede valer menos" que 12 pesos el kilo de uva rosada y la uva blanca, 15 pesos, en tanto que los tintos varietales no menos de 25 a 30 pesos el kilo. Si se paga en plazo, adelantan que van a insistir que la misma sea actualizada en función al precio del dólar. Respecto a las uvas tintas dijo que insistirán con el nuevo Gobierno nacional que los varietales tintos se hagan 100% con uvas tintas, sin cortes con otras variedades.
– Relación desfavorable
Al comparar los precios de las uvas con los valores promedio de exportación de vinos genéricos a granel en Argentina, Australia y Chile, el productor local es el que sale perdiendo respecto a sus competidores en lo referido a distribución equitativa de los ingresos. Mientras aquí el viñatero recibe el 12% del valor de cada litro de vino exportado, en Australia la relación es del 25% y en Chile del 18% promedio, según reveló un estudio realizado por el Observatorio Vitivinícola Argentino, una consultora dedicada a analizar la realidad del sector, que fue publicado por este diario en julio.