En medio de una profunda crisis hídrica y tras casi un mes de idas y venidas y de tensas negociaciones, finalmente ayer hubo acuerdo entre el Departamento de Hidráulica y los regantes para poner en marcha un plan de distribución de agua. Incluirá el riego durante 12 días en agosto y 28 en septiembre, en forma ininterrumpida y con un coeficiente de 0,29 m3, durante el período más crítico. Ante la intransigencia de los productores, en el organismo tuvieron que ceder posiciones y mejorar la oferta hasta alcanzar un acuerdo que medianamente satisface a todos los involucrados.

Cuando arrancaba julio, desde Hidráulica propusieron que se regara 8 días en agosto y 9 en septiembre, con un coeficiente de 0,32 m3. Después se cambió a regar por márgenes, por 8 días en agosto (a partir del 16), con un coeficiente de 0,36 m3/s. Y en septiembre, riego por 15 días con 0,38 m3/s. Con el acuerdo no hay riego por márgenes, son más días, pero con un coeficiente menor.

"Es un acuerdo en el que habrá que esforzarse para alcanzarlo y constituye todo un desafío", dijo ayer Oscar Coria, director de Hidráulica. Desde la propuesta inicial y ante la intransigencia de los regantes, el funcionario vino manteniendo una serie de encuentros y contactos con los integrantes de las juntas de riego de los departamentos hasta alcanzar un acuerdo que, de todos modos no conforma a todos, pero entienden que no hay mucho margen para seguir discutiendo.

El cronograma de riego comienza el viernes 20 de agosto y se prolonga hasta el martes 28 de septiembre en forma ininterrumpida, cuando vuelven los cortes. En octubre habrá 12 días de corta, 5 en noviembre, 4 en diciembre, 3 en enero, 3 en febrero y 7 en marzo.

El cronograma, de todos modos, no entusiasma a los regantes, pero decidieron avalarlo para no tensar más las negociaciones. Andrés Roca, de la junta de riego de Caucete, dijo que "no es lo ideal, pero lo vamos a acompañar". En el mismo sentido se pronunció Bruno Perín, desde la junta de riego de Pocito. El que está más molesto es Eduardo Garcés, titular de la junta de riego de Chimbas y presidente de la Federación de Viñateros. "Es un coeficiente muy bajo, pero parece que no queda otra", expresó cuando fue consultado.

Este año la negociación por establecer un cronograma de riego se da en un momento muy particular en el que los pronósticos hídricos siguen siendo pesimistas ya que no se acumula nieve en la cordillera sanjuanina y los diques están casi vacíos. Pero urgía tomar una decisión porque, por ejemplo los productores de hortalizas, chacras, semillas y melones, están en la recta final para decidir las inversiones en plantaciones. Incluso un sondeo entre los productores en el sector productivo reveló que estiman una merma del 20% en hectáreas la próxima temporada, a causa de la sequía.

Desde Hidráulica, Coria explicó que al plan acordado, las juntas de riego que tienen que ver con cada canal podrán hacer pequeños ajustes. Así, por ejemplo, si recortan días, pueden llegar a concentrar un coeficiente mayor. Es que por ejemplo, los regantes de Pocito y Sarmiento necesitan más "peso" de agua, es decir mayor coeficiente para regar sus cultivos. Además, no es la misma demanda los productores que tienen viñedos que los que tienen chacras. Los requerimientos son distintos y los días en los que pueden llegar a resignar agua también. En definitiva, el plan acordado puede llegar a sufrir pequeñas variaciones. Y habrá que esperar también el agua de las perforaciones.

DENUNCIA

Eduardo Garcés, presidente de la junta de riego de Chimbas, denunció ante Hidráulica a Ricardo Giménez "por invocar falsamente el cargo de interventor de la junta de riego de Chimbas". Y también recurrió a la justicia penal con la imputación de haber cometido el delito de usurpación de autoridad.

 

  • Ayudas para ser más eficientes

La idea en el Gobierno sanjuanino es que además de poner en marcha acciones para hacer un uso racional del agua para riego en medio de una preocupante crisis hídrica, como consensuar un plan con los regantes para la próxima temporada, es incentivar a darle un uso más eficiente al agua. Y para eso desde el Ejecutivo local se ha dispuesto un fondo de unos 2.500 millones de pesos que incluyen desde subsidios para los productores más chicos hasta créditos a tasas subsidiadas para los más grandes. Los recursos están destinados a instalar, por ejemplo, sistemas de riego por goteo.

Entre las opciones hay una línea de subsidios para pequeños productores de hasta 5 hectáreas, que consiste en destinar recursos para hacer frente a los gastos de planos y sistema de riego para 2 hectáreas, dejando previsto las 3 restantes. En ese caso, el productor deberá disponer de un reservorio o bomba de agua. Para los productores con mayores superficies hay préstamos con tasas subsidiadas.