Tras la calma del año pasado en que la crisis estancó la producción fabril y en consecuencia sobró gas en Argentina, este año el panorama se revirtió y las industrias y expendedoras de GNC sanjuaninas -junto con las de todo el país- volverán a sufrir las restricciones del 2008: "Sí, si van a haber cortes este invierno en San Juan, pronto van a empezar las restricciones debido a la falta de gas del país", confirmó a DIARIO DE CUYO una fuente oficial del sector de servicios públicos.

El aumento del ritmo de producción industrial sumado al estancamiento en la generación de gas y combustibles harán que haya menos disponibilidad y como la prioridad en el país la tiene el consumo domiciliario, parece que los cortes serán inevitables.

"Sabemos que van a haber problemas", dijo Daniel Cano, miembro de la comisión de la Unión Industrial de San Juan. "Los primeros afectados van a ser la fábrica de cemento Loma Negra, la cerámica Scop y la conservera Arcor que son las que más volúmenes en metros cúbicos por día consumen, y también la fábrica de galletitas Dilexis", enumeró.

En la Cámara Minera también admitieron estar al tanto de las posibles restricciones para las caleras, al tiempo que Bernardo Turcumán, vice de la Cámara de Expendedores de Combustibles, dijo que Enargas ya avisó del problema para el GNC. "Desde hace 15 días que el Enargas nos puso en "alerta amarilla" para que no excedamos los cupos de venta de GNC. No es grave, pero es un aviso teniendo en cuenta que hay buenos volúmenes de consumo y nadie puede asegurar que no haya cortes en el suministro cuando esté más entrado el invierno", dijo Turcumán.

La semana pasada, con los primeros fríos, empezaron las restricciones en grandes plantas fabriles del país como Siderar y Acindar, y el viernes pasado les cortaron el gas a las industrias yeseras y a las estaciones de servicio de GNC del departamento mendocino de Malargüe.

Hasta ayer en San Juan ninguna industria gas-dependiente había recibido comunicaciones de restricciones de parte de la distribuidora Ecogas, salvo las caleras que incorporaron nuevos hornos el año pasado. Éstas ya sabían que sólo podían usar gas durante el verano y ya incorporaron el carbón residual de petróleo pulverizado para hacer andar sus hornos, según informó ayer el vice de la Cámara Minera local, Jaime Bergé. "El resto de las caleras temen que en cualquier momento vuelvan los cortes, por eso la mayoría hizo inversiones para adaptar sus hornos a carbón", agregó el minero.

Por su lado, el industrial Cano recordó que el año pasado "la industria local no sufrió cortes" y lo atribuyó además del notable descenso del ritmo de producción por la crisis -que hizo que se usara menos gas en toda la Argentina-, a la inauguración de la ampliación del gasoducto Beazley-La Dormida que permitió llegar más flujo de gas a San Juan. Esa obra clave permitió subir de 1.100.000 metros cúbicos a 1.300.000 el volumen de gas que llega a la provincia.

Ahora se podría aumentar ese volumen a 1.500.000 o 1.600.000 metros cúbicos para San Juan, pero para eso hace falta que la distribuidora Ecogas haga una obra de compresión de gas en el gasoducto Mendoza Norte, para lo cual aún no hay anuncios.

Desde hace unos años la producción de petróleo y gas natural continúa con una tendencia decreciente que se acentúa durante el invierno. Según un informe del Instituto Argentino de la Energía (IAE) en el último año bajó un 1,6% y un 4,1% las producciones de petróleo y gas respectivamente (ver aparte).