El Banco Nación se apuró en "recoger el guante" luego de las medidas que adoptó el Banco Central la semana pasada, tendientes a mejorar la remuneración para los inversores que se quedan en pesos, y desalentar el traspaso a las colocaciones en dólares.

 

La entidad que preside Javier González Fraga anunció que aumenta tres puntos porcentuales la tasa que paga por captar depósitos a menos de 60 días de plazo, arrancando por cifras mínimas como 10.000 pesos.

 

Aunque no se informó oficialmente a cuánto se irán los rendimientos, para plazos fijos minoristas que se hacen por "home banking" pasarían del 45% al 48% anual%. Para los mayoristas se ubicará cómodamente por encima del 50%. El objetivo es ofrecerle al ahorrista una remuneración más elevada para quedarse en pesos y evitar la fuga hacia el dólar.

 

Para favorecer esta medida, el Central había eliminado para los bancos la restricción de invertir como máximo 65% de su patrimonio en Leliq, extendiéndola al 100%. De esta forma, cada depósito que reciben de clientes a plazo las entidades pueden ser a su vez colocados en el Central a una tasa superior al 68% anual. Esto permitiría una búsqueda mayor de recursos en el sector privado y pagar más tasa.

 

Se convierten así en un pasamanos de los excedentes monetarios de algunas familias y de empresas, hacia el Tesoro de la autoridad monetaria, por la que los retribuye a través de las Letras de Liquidez.

 

Más aún cuando el Comité de Política Monetaria (Copom) anunció pocos minutos antes de la apertura de los mercados que mantendrá a lo largo de abril una tasa piso para la remuneración de las Leliq de 62,5%, y a partir de ahí seguirá siendo endógena, es decir determinada por el mercado en función de las necesidades diarias de esterilización y expansión de base monetaria, dentro de la nueva pauta de emisión cero hasta fin de año.

 

Aunque no se realizaron mayores aclaraciones, es obvio que la entidad oficial busca marcar la cancha al resto de los bancos, tanto públicos como privados, porque nadie querrá perder participación de mercado.

 

En el último dato difundido el viernes por la autoridad monetaria ya se notaba un incremento de las tasas promedio del sistema. Los bancos pagaban 43,5% anual en promedio para inversores pequeños y 48% para las grandes empresas.