En un contexto donde las trabas comerciales que puso la Argentina sobre Brasil terminó perjudicando a varios productos sanjuaninos, ahora y tras una drástica medida del Gobierno de CFK de suspender un acuerdo automotriz con México, las máximas autoridades del país azteca ya amenazaron con subir los aranceles para el ingreso de productos argentinos. De confirmarse, pondría en jaque a los productos sanjuaninos: mosto, ajo, vino y juntas, entre otros rubros, que tienen como destino este país (ver infografía), corren peligro. Este escenario ha generado mucha preocupación entre los empresarios del sector, ya que el mercado mexicano, detrás de los popes del continente (EEUU, Canadá, Brasil y Chile), es un nicho comercial destacado y en permanente crecimiento.
En el Gobierno local, muy ocupados en resolver y finiquitar los problemas con Brasil (ver nota vinculada), prefirieron no opinar hasta que no se sepa qué tipo de medidas tomarán las autoridades mexicanas -si es que finalmente las toma o negocia con la Argentina, claro-, aunque por lo bajo un alto funcionario dijo que “si se cumple, habrá que negociar como se está haciendo con Brasil, pero sería otro dolor de cabeza más”. En el año 2011 las exportaciones sanjuaninas a ese país fueron por un global de 6.130.437,41 de dólares; mientras que el comercio total bilateral fue de 2.758 millones de dólares en 2011, con un déficit de 820 millones para la Argentina, según datos de la Secretaría de Economía mexicana.
“Primero pasó con Brasil, después algunas escaramuzas con la Unión Europea y ahora pasa con México. Así, en conflicto permanente, no se puede vivir y más aún si el objetivo es crecer. México no es el gran mercado del ajo, pero es respetable. Y si se nos cierra un mercado y después otro, vamos por mal camino. El problema va a estar con el ajo morado que es el que más consumen los mexicanos”, se quejó Alfredo Figueroa, de la Cámara de Exportadores de Ajos. “Impacta en la medida que por acciones de nuestro país se cierren algunos nichos comerciales, en este caso peligrando el mercado de México. A todos los países que ingresa el mosto se paga un arancel, sumado al que se paga en el país (retenciones), y si lo suben se complica todavía más”, apuntó Jorge Rives, integrante de la Cámara de Mosteros.
Además de los productos de base agrícola, el envío desde San Juan de juntas y ferroaleaciones para la industria automotriz mexicana es otra actividad que mira de reojo este escenario turbulento que hay por estos días con este país. “La política exterior de este Gobierno nos ha complicado en el último tiempo y nos puso contra las cuerdas al momento de cerrar algunos negocios con países en los que nuestro país tiene conflictos comerciales. Lo de México, de concretarse, sería muy duro”, confió a este diario un alto directivo local de una autopartista.

