Frente a la decisión del Gobierno nacional de eliminar la doble indemnización y la prohibición de los despidos para el 2022, en el sector empresario local opinan que las medidas impulsarán la toma de empleados porque mientras estuvieron vigentes desalentaron la generación de más puestos de trabajo. Por el contrario, desde el sector sindical manifestaron el temor a que, sin la protección, se vaya a producir una escalada de cesantías.

Con la economía recuperándose de los estragos que generaron las restricciones por la pandemia de coronavirus y con proyecciones de un rebote de la actividad para el 2022, en la administración nacional evalúan que la doble indemnización y la prohibición de despidos no continúen en el 2022 y se se pase a un "esquema intermedio", para gradualmente eliminar ambas disposiciones.

Frente a este panorama, desde la Unión Industrial de San Juan, Ricardo Palacios consideró que "primero hay que considerar que nadie se deshace de un buen empleado. Y como la producción está mejorando hará falta tomar más mano de obra, pero nadie se animaba a hacerlo cuando estaban vigentes estas medidas".

Dino Minnozzi, presidente de la Federación Económica, opinó que "si el giro comercial está mejorando, será un incentivo para tomar más personal". El dirigente pidió "certidumbre" porque dijo que para tomar medidas en una empresa a largo plazo hace falta saber a qué disposiciones habrá que atenerse. "Pusieron las medidas, ahora hablan de sacarlas, pero no hay garantías de qué va a pasar en el futuro", sostuvo.

Desde la Cámara de Comercio, Hermes Rodríguez expresó que "no es época de prescindir de ningún empleado en esta época del año, por el contrario se puede llegar a incentivar la generación de nuevos puestos de trabajo". El dirigente hizo referencia a las ventas por las fiestas de fin de año y al movimiento que está teniendo el comercio sanjuanino estos días.

Por lo que se ha podido conocer hasta ahora, no sería una eliminación total sino que se buscará un punto intermedio para no desarmar las medidas de forma inmediata sino de forma escalonada. Cabe destacar que por estas horas se trata de un tema que preocupa al sector industrial pese a la recuperación de la actividad que se registró en los últimos meses.

En la Unión Industrial Argentina (UIA) sostienen que estas medidas desalientan la creación de empleo y que si bien se entienden como parte de una coyuntura de emergencia, como fue el inicio de la pandemia el año pasado, ya no tienen justificación alguna y complica los planes de las empresas de contratar personal.

Pero entre los empleados la decisión no cae simpática sino que, por el contrario, genera temor.

Eduardo Cabello, referente de la CGT en San Juan y secretario general del gremio de la Construcción, UOCRA, sostuvo que "puede que en algún sector se vayan a producir despidos, pero está claro que no son medidas que puedan estar vigentes en forma permanente sino que, en algún momento, había que cambiarlas".

Mario Matic, secretario general de la Asociación Bancaria, manifestó que "la posibilidad de despidos es un riesgo latente y cualquier sector puede quedar expuesto". El dirigente hizo referencia en particular a la situación del Banco Santander, que está en un proceso de achique de sucursales, incluidas las de San Juan.

También Mirna Moral, desde el Sindicato de Empleados de Comercio, alertó sobre la posibilidad de que se vayan a producir cesantías sin el amparo de las medidas nacionales". "Vamos a estar atentos a cualquier movimiento que se pueda producir", dijo la gremialista.

Más moderado se mostró Alejandro Kokot, del sindicato de Aguas Gaseosas. En ese ámbito dijo que la actividad nunca cayó, por el contrario se mantuvo estable durante la pandemia porque nadie dejó de consumir bebidas.

Carlos Ozán, desde el gremio de los trabajadores vitivinícolas FOEVA fue otro de los dirigentes que se mostró preocupado por la salida del amparo de la doble indemnización. "Puede que alguno aproveche para producir despidos", sostuvo.

 

  • Origen de la decisión

La prohibición de despidos fue decretada inicialmente a fines de marzo de 2020, luego de que el presidente Alberto Fernández cuestionara públicamente a los empresarios que decidieron echar a trabajadores en medio de la pandemia y del freno económico producto de la cuarentena obligatoria.

La decisión fue tomada luego del intento del Grupo Techint de despedir 1.450 trabajadores de la constructora por la parálisis de la actividad. El primer DNU rigió desde el 1 de abril, el segundo, desde el 1 de junio y el tercero desde el 1 de diciembre.

El propio ministro de Trabajo de la Nación, Claudio Moroni, afirmó que las condiciones actuales de la economía "son distintas" por lo que se evaluaba modificar las medidas. Hasta el presidente Alberto Fernández deslizó en octubre que la prohibición de despidos y la doble indemnización "no van a sostenerse en el tiempo".