El lunes será el día clave para los casi 500 trabajadores de la autopartista Delphi. Es que luego de 2 meses de incertidumbre, sabrán si la empresa cierra y cobran el 100 por ciento de sus indemnizaciones o si seguirán cumpliendo sus tareas con un nuevo dueño, el posible comprador, Enrique Ruffo, de la firma Cibasa. El factor que inclinará la balanza hacia una de las 2 opciones está en manos de la automotriz PSA Peugeot – Citroën, que compra el 90 por ciento de los mazos de cable que fabrica la autopartista sanjuanina. El problema radica en que PSA adquiere los insumos que hace Delphi San Juan a un precio mayor de los que construye Delphi Brasil. Entonces, para seguir comprando a nivel local y al mismo valor (o a uno que se aproxime), para que la planta sea viable para el futuro propietario, ya que hoy da pérdida, tendrá que hacer un esfuerzo económico de su parte o necesitar de una compensación o beneficio por parte de la Nación, por ejemplo, según explicaron fuentes cercanas a la negociación. La decisión de la automotriz estará entre hoy y el lunes.

Ayer se llevó a cabo una nueva audiencia de conciliación obligatoria que dictó la Subsecretaría de Trabajo, en la que el Gobierno provincial, el gremio plástico, Delphi y los representantes del Ministerio de Trabajo de la Nación, “hemos acordado que el lunes se le de un cierre definitivo a esta situación”, resaltó Alejandro Siero, representante de la autopartista, ante los trabajadores que se habían reunido en la puerta de la fábrica. Además, explicó que antes de las 17 personalmente les informará del resultado. “Si seguimos, vamos a comunicarles los términos del acuerdo que haya y se va a someter al conocimiento de ustedes. Si no seguimos, iniciaremos el proceso de cierre de la planta y a presentarle las liquidaciones finales a cada uno de ustedes, para comenzar el proceso de pago de indemnización”, resaltó el directivo. La empresa había anunciado en diciembre que cerraba sus puertas (ver cronología), por lo que dejaba a 470 trabajadores en la calle, con su correspondiente indemnización. Pero por gestiones de la Nación y la Provincia, se buscó una salida para que la autopartista transfiriera el paquete accionario a un comprador. Así, apareció Enrique Ruffo, dueño de Cibasa, quien encaró las tratativas.

Las fuentes dijeron que ayer el gobernador José Luis Gioja, el equipo del Ministerio de Producción y Delphi se reunieron con representantes de PSA Peugeot. El objetivo fue negociar con la automotriz para que siga comprando los mazos de cable al mismo precio a la planta sanjuanina, a pesar de que Delphi Brasil los venda más barato. Al ser el principal cliente, PSA es el sostén de la autopartista local. “En la negociación con Ruffo están pendientes ciertas definiciones que tiene que dar PSA. Hoy nos reunimos con ellos para ver si hay posibilidades de que den algunas concesiones que se están necesitando para que esta planta pueda ser viable. El problema hoy es que se trabaja a pérdida, con lo cual, no es atractiva para ningún continuador”, dijo Siero.