Tras reunirse con los empresarios del sector, que venían reclamando un aumento desde abril, el Gobierno autorizó ayer que el boleto mínimo escale de 1,75 a 2 pesos y que el escolar suba de 70 a 75 centavos. Los propietarios de los colectivos querían que el incremento fuera mayor y ayer manifestaron su descontento, pero aseguraron que “es mejor esto que nada”.
El aumento alcanza a todos los pasajes para viajar dentro de la provincia y va de un 14,5 a un 22 por ciento, dependiendo de la cantidad de kilómetros a recorrer. La excepción es el boleto escolar o estudiantil, que tendrá un aumento nominal de 5 centavos y que representa apenas un 7 por ciento más.
La idea inicial del Gobierno era mantener el escolar sin cambios, pero por una cuestión de practicidad habilitó una suba que en la práctica casi no se sentirá. Pasa que hoy cuesta 70 centavos y los choferes, como hay escasez de monedas de 10, en la mayoría de los casos dan 25 centavos de vuelto en lugar de 30. Para evitar que sigan los problemas con el cambio, el Gobierno decidió fijarlo directamente en 75 centavos.
Es el segundo aumento que tendrá el escolar desde 1996. La anterior fue en 2009, cuando tras estar congelado por más de 13 años, trepó de 50 a 75 centavos. Finalmente, por las protestas estudiantiles que coparon las calles, la gestión giojista moderó la suba y lo dejó en los 70 centavos que rigen hasta hoy.
Los boletos que menos aumento tendrán desde mañana son los de las líneas urbanas, que junto al escolar son los más demandados por los usuarios -representan más del 70 por ciento de lo que venden las empresas-. El de primera y segunda sección (es el mínimo) se va 1,75 a 2 pesos, lo que representa un 14,2 por ciento más. Mientras que el de tercera sección trepa de 2 a 2,25 pesos, es decir 12,5 por ciento más.
La suba para la tarifa de media distancia será del 14,5 por ciento y en la de larga distancia de un 22 por ciento. En el primero de los casos, por ejemplo, el viaje al departamento Caucete pasará de 4,25 pesos a 4,90. En el segundo, el pasaje a Calingasta se va de 41 a 50 pesos y a la localidad de Barreal, de 44 a 54 pesos.
Los nuevos valores se dieron a conocer oficialmente ayer en la tarde, algunas horas después de la larga y acalorada reunión que mantuvieron en la mañana los representantes de la Asociación de Transporte Automotor de Pasajeros (ATAP) y el secretario de Servicios Públicos de la provincia, Daniel Campos. Los empresarios no salieron conformes, porque pretendían que el valor del boleto mínimo escalara a los 3 pesos.
Los propietarios de los colectivos aducen que el aumento que autorizó la gestión giojista no les alcanza para compensar el incremento que tuvieron en lo que va de este año en los gastos operativos. Especialmente en los sueldos de los choferes, los repuestos de las unidades y el combustible -antes pagaban por litro de gasoil 98 centavos y hoy les cuesta 1,79 pesos-. El presidente de ATAP, Carlos Matus, aseguró ayer que “un boleto a 2 pesos no se ajusta a lo que dice el estudio de costos, no es para nada suficiente”. Sin embargo, paso seguido señaló que “como está el sector, esto es mejor que nada”.
En el encuentro, que se llevó a cabo en el segundo piso del Centro Cívico, los empresarios plantearon preocupación por lo que consideran faltas de garantías de la Nación en el cumplimiento del nuevo esquema de subsidio al gasoil que se aplica desde este mes y que les ha significado una pérdida parcial del beneficio. Campos aseguró que “si a futuro hay complicaciones, nos volveremos a juntar y los analizaremos”.