Disfrutar de algunos días de playa es una de las metas del año laboral. En la Costa Atlántica, los precios varían notablemente dependiendo de cada localidad. Como cada año, los destinos manejan diferentes tarifas según se trate de playas más populares o aquellas más exclusivas: en ese marco, por ejemplo, un día de carpa durante enero en un balneario puede costar entre $ 800 y $ 2.500 por día, según la ciudad costera.

 

Mar del Plata, principal centro turístico y balneario de la Argentina, ofrece durante el primer mes del año carpas que van de los $ 1.000 a los $ 1.500 diarios. Algunas de ellas incluyen pileta entre sus servicios. La sombrilla en este tipo de complejos, por su parte, se ofrece a $ 1.250 por día. A la hora de dejar el auto estacionado mientras se disfruta la estadía en el mar, el precio es de $ 200.

 

En las playas de Punta Mogotes, en “La Feliz”, los precios son similares a los de la Ciudad a la hora de comer. Una porción de papas fritas cuesta $ 70; una empanada, $ 30; el combo de hamburguesa con papas y bebida, $ 200; y las gaseosas, $ 45 o $ 70, según su tamaño.

 

En Villa Gesell, en tanto, los valores bajan notablemente a la hora de contratar servicios de playa. Una carpa se consigue por $ 800 por día, mientras que una sombrilla se puede obtener por $ 600 diarios. En lo que a gastronomía respecta, uno de sus famosos paradores ofrece una porción de papas fritas para compartir a $ 180; una hamburguesa completa (con jamón, queso, lechuga, cebolla caramelizada más ración de papas fritas) a $ 250 y las gaseosas pequeñas a $ 60.

 

El segmento ABC1, por su parte, tiene su lugar en Cariló, la exclusivísima localidad perteneciente al partido de Pinamar. La diferencia de precios es evidente cuando de servicios de playa se trata. Aquí, cada día de enero se pagan por una carpa $ 2.500. La sombrilla, $ 1.500. En cuanto al menú típico de playa, los números no son tan distintos: la porción de papas fritas cuesta $ 100: la hamburguesa completa, $ 200 y la gaseosa chica, $ 65.

 

En cuanto a la venta ambulante en las playas de la Costa, un choclo puede adquirirse por $ 80 en Mar de las Pampas, por $ 60 en San Clemente del Tuyú o por $ 50 en Mar del Plata, por ejemplo.

 

Por último, una docena de churros en Pinamar se vende a $ 200 pero desciende a $ 150 en San Clemente, lo mismo que en Costa del Este. En tanto, los clásicos churros rellenos de “El Topo”, en Villa Gesell, se venden en las playas a $ 200 las 12 unidades.

 

Fuente: Ámbito.com