Por solicitar un préstamo personal de 1.500 pesos, se llega a devolver por estos días 3.132 pesos en un plazo de 12 meses. O sea, un 108,8% más. Hasta hace 90 días, previo a la devaluación, la tasa de interés era alta pero en este caso se ubicaba algunos puntos menos, en orden al 99,2% para un préstamo de este monto. En rigor, las financieras subieron en este tiempo entre 3 y 9 puntos las tasas, a la vez que achicaron la cantidad de cuotas; por ejemplo de 18 las bajaron a 12, o de 8 a 6 y, en algunos casos, acotaron los montos. Sin embargo, este nuevo escenario no amedrentó a los habituales consumidores de estos créditos que siguen recurriendo a esta herramienta, según explicaron a DIARIO DE CUYO desde 7 negocios del rubro.

Los denominados créditos de consumo, es decir aquellos que inmediatamente se vuelcan a gastos corrientes como por ejemplo comprar útiles en el inicio escolar o para adquirir una moto, son líneas que se gestionan por fuera de las entidades bancarias y son de fácil renovación, inclusive mucho antes que se salde el crédito original. Pero gozan de altas tasas, ya que buscan "’atajarse” en virtud que son fijas y no variables, lo cual les permitiría cubrirse.

"Venimos muy bien, hay demanda y hemos tratado de mantener las condiciones. Esta es una época en la que la gente recurre a esta herramienta para cubrir gastos vinculados al colegio o para cambiar su auto, y en épocas complicadas como éstas los préstamos resultan un alivio para el bolsillo de muchos trabajadores”, comentó Emiliano Barrionuevo, de la firma Crédito Argentino. "Marzo está siendo un buen mes, el volumen de clientes para esta época del año es interesante y vemos que a pesar que aumentaron un poquito las tasas, los clientes siguen siendo muchos”, agregó Débora, de Credisol, que ofrece préstamos que van de 1.500 a 5.000 pesos, hasta en 12 pagos mensuales.

En tanto que Daniel Milla, de la financiera Opción, contó que "nosotros achicamos de 8 a 6 las cuotas para devolver los préstamos, y la tasa se movió no más allá de un 9% sobre las que teníamos antes de la devaluación”. El directivo también dijo que "la demanda no cayó porque la gente renueva mucho los créditos, siempre y cuando venga pagando en término, algo que le exigimos como lógica condición”.

En cuanto a las tasas, explicaron que se encuentran atadas a los montos que se solicitan y, como es lógico, a la cantidad de cuotas: por ejemplo, para un crédito de 2.000 pesos en 12 cuotas, se termina devolviendo -en promedio- 3.720 pesos, mientras que si es en 6 pagos, 3.000 pesos. "Lo habitual es que los clientes pidan créditos chicos y en muchas cuotas”, contó Alejandra, de la firma Credil, donde ofrecen 1.000 pesos para devolver en 12 pagos fijos de 166 pesos (antes eran de 164 pesos). Mientras que en el local de Rapicuotas, Ramiro dijo que "la gente siempre recurre a estos créditos y por ejemplo marzo es un mes con muchos clientes renovando o tomando por primera vez su crédito personal".