El último informe que acaba de publicar la Secretaría de Energía de la Nación, con datos a septiembre; indica que en San Juan hay solamente 7 usuarios generadores de energía solar inscriptos para el plan que permite obtener energía proveniente de renovables para autoconsumo, e inyectar el excedente a la red de distribución eléctrica. El programa se denomina "generación distribuida", es una ley que nació en el país en el 2018 y que aquí fue reglamentada el año pasado. Así, esta provincia que es líder en generación solar, sin embargo tiene un crecimiento lento en usuarios "generadores", y se ubica quinta en el ranking nacional. Lidera Córdoba con 347 usuarios, seguida de Buenos Aires con 165, CABA con 53 y Mendoza con 30 (ver infografía).

En el sector le echan la culpa de tan baja adhesión a que la reglamentación realizada el año pasado por el Ente Provincial Regulador de Electricidad (EPRE) tiene fallas, y por lo tanto, los requisitos que piden las distribuidoras para ingresar al programa están lejos de ser un incentivo, distinto a lo que sucede en otras provincias. Fuentes del sector privado criticaron que el contrato que exigen firmar las distribuidoras es "leonino", y que los costos para el usuario son altos porque la tarifa o VAD (Valor Agregado de Distribución) se le cobra por la energía que inyecta al sistema, en vez de cobrarle sólo por la energía que consume. Eso hace que las empresas u hogares que colocan paneles solares en San Juan, lo usen sólo para autoconsumo y cuando generan más energía de la que precisan, esta se pierde en vez de introducirla a la red para que la aproveche el conjunto de la sociedad.

El presidente de Energía Provincial Sociedad del Estado (EPSE) opinó que existen trabas en la reglamentación asociadas al costo de la tarifa, mientras que desde el Ente Provincial Regulador de Electricidad (EPRE), justificaron la normativa.

Víctor Doña, titular del EPSE; opinó que hay dos causas que provocan la escasa adhesión al sistema. Mencionó un factor nacional, que es que la plataforma nacional que permite la inscripción de los usuarios y por la cual se pueden pedir los beneficios de esta ley, está funcionando de manera lenta. Pero también consideró que el factor local: "La reglamentación de San Juan no quedó totalmente bien", dijo, y agregó que "no termina de incentivar a la gente para que adhiera a este mecanismo". Dijo que en Buenos Aires y Córdoba tienen otro formato menos costoso, y por eso esas jurisdicciones van a la punta en este sistema. "Habría que trata de adaptar y ajustar nuestra reglamentación a la de esas provincias", indicó. Por su parte, el presidente del EPRE, Oscar Trad; no cree que esa sea la causa. Cree que hay pocos usuarios por los costos de inversión, ya que la adquisición de paneles solares es caro, y opinó que se irá abaratando paulatinamente cuando entre en funcionamiento la fábrica de paneles sanjuanina. Además justificó que se cobre el VAD para ingresar energía a la red, porque la distribuidora debe mantener sus redes e infraestructura en condiciones óptimas, y el usuario generador "debe pagar por usarlas". "Eso se discutió mucho cuando se hizo la reglamentación y mi opinión es que el VAD lo tiene que pagar", dijo. Por último, Trad consideró que la reglamentación de la ley lleva poco tiempo, y también que hay que medir la escala de economía de cada provincia.

 

Datos principales

* Según datos a setiembre, de la Secretaría de Energía dependiente del Ministerio de Economía; los usuarios generadores de todo el país pasaron de 272 en octubre de 2020 a 614 en septiembre del 2021. Todos esos proyectos completaron la instalación y se convirtieron en usuarios generadores. La potencia instalada por esos usuarios generadores tuvo un crecimiento fuerte: pasó de 2.594 kilowatts en octubre del 2020, a 6.920 kilowatts instalados y conectados a la red mediante un medidor bidireccional, en septiembre pasado.

* La ley 27.424 de Generación Distribuida para Inyectar Excedentes a la Red, fue fue sancionada a nivel nacional en el 2017, y San Juan adhirió a ella en diciembre de 2018, pero no se reglamentó hasta el año pasado, luego del Acuerdo San Juan. Los usuarios generadores que inyectan también a la red obtienen beneficios impositivos. Por cada kilovatio instalado, un usuario inversor logra $30.000 en crédito fiscal, que se puede usar para pagar a la AFIP cualquier impuesto.

* La instalación de un sistema de placas fotovoltaicas para generar energía requiere de un inversión importante, pero las empresas del sector aseguran que tiene un retorno positivo. Los tiempos de amortización están en el orden de los 8 años.