El director general de la Organización de la Vid y el Vino (OIV), Jean-Marie Aurand, presentó el 11 de abril en la sede de la Organización, en París, los elementos informativos sobre el potencial de producción vitícola, el balance de la cosecha, y la situación del mercado y los intercambios internacionales en 2016.

El informe revela entre sus principales conclusiones lo siguiente:
*El tamaño del viñedo mundial se mantiene en 7,5 millones de hectáreas al término del 2016, marcando que la superficie vitícola de China continúa en crecimiento en 16.800 hectáreas lo que confirma su lugar de segundo en el viñedo mundial. 
*Se produjeron 267 millones de hectolitros de vino en 2016, un retroceso del 3 % con respecto al año anterior.

El consumo mundial de vino en 2016 llegó a 242 millones de hectolitros, similar al 2015.

*Se consumieron 242 millones de hectolitros de vino en 2016. Un consumo que se ha estabilizado desde la crisis económica de 2008. 

*Respecto a los intercambios mundiales de vino en término de volúmenes hay una ligera disminución (104 millones de hectolitros, un -1,2 %) pero con un mayor valor (29. 000 millones de euros, un + 2%). 

Viñedos: 

Hay una estabilización del viñedo mundial en 7,5 millones de hectáreas desde 2008. El viñedo destinado a la producción de uvas de vinificación, uvas de mesa, uvas pasas, en fase de producción o todavía improductivo. 

En 2016, la superficie vitícola China continúa en crecimiento (+ 16 800 ha). 

Las dimensiones del viñedo se reducen en Turquía (- 17 000 hectáreas) y en Portugal (- 9000 hectáreas). 

En Europa, únicamente el viñedo italiano aumentó en 8.200 hectáreas. España sigue a la cabeza de las superficies cultivadas con casi un millón de hectáreas, por delante de China (850.000 hectáreas) y de Francia (790.000 hectáreas).

Vinos: 

La producción mundial de vino está en franca disminución con respecto a 2015. Alcanza a los 267 millones de hectolitros, o sea, un retroceso del 3 % con respecto a la producción de 2015. 
Italia (50,9 millones de hectolitros) confirma su puesto primero como productor mundial, seguida por Francia (43,5 millones de hectolitros) y España (39,3 millones de hectolitros). El nivel de producción sigue siendo elevado en Estados Unidos (23,9 millones de hectolitros).

En los países de América Latina y en Sudáfrica, las condiciones climáticas desfavorables han tenido consecuencias negativas en la producción. Se registra una drástica reducción de la producción en Argentina (9,4 millones de hectolitros), en Chile (10,1 millones de hectolitros), en Brasil (1,6 millones de hectolitros) y en Sudáfrica (10,5 millones de hectolitros). 

Consumo:

El consumo mundial de vino se estabiliza en 242 millones de hectolitros, y se mantiene estable respecto al año anterior. Esta tendencia al estancamiento se observa desde 2009. Con 31,8 millones de hectolitros de vino consumidos en 2016, Estados Unidos confirma su posición primera como consumidor mundial desde 2011, seguido por Francia (27 millones de hectolitros), Italia (22,5 millones de hectolitros), Alemania (20,2 millones de hectolitros) y China (17,3 millones de hectolitros.).

La notable disminución en Hungría, Argentina y Rumania se ha visto compensada por un alza en el consumo en Estados Unidos, China e Italia. El consumo de Francia y España permanece estable.

Intercambios internacionales:

En 2016, los intercambios mundiales de vino han sufrido una disminución en volumen de un 1,2 % (104 millones de hectolitros) pero siguen aumentando en valor, hasta alcanzar los 29 000 millones de euros (+2 % con respecto a 2015). 

Cosecha 2017

Las primeras estimaciones de la cosecha de 2017 en el hemisferio sur generales en alza con respecto a 2016, excepto para Australia y Nueva Zelanda, países que prevén una producción en gran medida equivalente a la del año anterior. Se calcula que Argentina tendrá una cosecha del orden de los 19 millones de quintales algo superior en un 10 % al 2016.

OIV