Bien atrás en el predio pocitano está situado el patio de comidas con diferentes carpas que ofrecen su menú a la parrilla, a las llamas o los infaltables panchos, pizzas y papas fritas. Desde $10 es suficiente para conseguir algo para comer. Como el caso del pastel frito con un vaso de gaseosa, que se consigue a ese precio. Con un poco más de dinero se puede consumir un choripán más un vaso de 250cc con gaseosa, a $50. La tradicional milanesa con ensalada y pan cuesta $70, mientras que la parrillada para dos personas sube a $190.
En cuanto a bebidas, los precios van desde $20 que cuesta la botella personal de soda, agua o gaseosa. Otro puesto ha preparado 4 combos: el primero consiste en sandwich de pan francés, con jamón y queso, más gaseosa de 500cc a $35. Otra alternativa es la de una docena de empanadas, con gaseosa de 1,5 litro a $100. Como tercera posibilidad ofrecen 2 empanadas, junto a gaseosa, a $30; y la cuarta es media docena con gaseosa de 1,5 litro a $65.
Llevar el propio almuerzo
El patio de comidas no sólo está destinado para comer los alimentos que se adquieren allí, sino que además cada visitante puede llevar su propia comida y hacer uso de las instalaciones totalmente gratis.