Se aproxima la vendimia y en medio de la crisis económica, la industria del mercado de traslado se anticipó a pedir al Estado financiamiento más flexible para la próxima elaboración, evitando que sea a través de los bancos como es usualmente. Las bodegas "trasladistas" -que incluyen a productores, elaboradores o maquileros, quienes elaboran sus vinos por cuenta de terceros- quieren que la gestión uñaquista implemente líneas de créditos destinadas a la industria a través de Fiduciaria San Juan, la sociedad con participación estatal que facilita el acceso al crédito con tasas de interés más bajas, y a mayor plazo de devolución que los bancos. Fiduciaria San Juan SAPEM (Sociedad Anónima con Participación Estatal Mayoritaria) viene otorgando créditos blandos de cosecha y acarreo para que los productores puedan levantar la uva, exigiendo solamente garantías hipotecarias (sobre un inmueble) o prendarias (vehículo o maquinaria). En cambio para las pymes como son las bodegas, el Gobierno dispone cada año de créditos a través del Fondefin (Agencia San Juan desarrollo de Inversiones) que financia inversiones de capital de trabajo, con tasas subsidiadas pero mediante licitaciones en las instituciones financieras de la provincia. "Le hemos pedido colaboración al Gobierno para la cosecha 2020 por medio de Fiduciaria San Juan. Hay muchos bodegueros trasladistas que quedan fuera de los prestamos usuales porque no tienen carpeta en los bancos", dijo Angel Leotta, presidente de la Cámara Vitivinícola que reúne al mercado trasladista sanjuanino. Los vitivinícolas se reunieron con el gobernador Uñac el lunes pasado y dicen que allí transmitieron el pedido. Fiduciaria San Juan es una herramienta inclusiva destinada a otorgar préstamos a quienes no son sujeto de crédito en los bancos. Sólo solicitan una garantía, mientras que las entidades financieras exigen estados contables, balances y flujo de fondos. "Lograr créditos a través de Fiduciaria San Juan sería el punto de mayor interés para el sector trasladista este año", agregó Leotta. El ministro de Producción, Andrés Díaz Cano, no anticipó ninguna respuesta. "Hay que esperar las medidas nacionales para decidir las que tomará la provincia para el sector vitivinícola", dijo el funcionario. Pero recordó que el año pasado el Gobierno entregó créditos de elaboración a través de la Sociedad Fiduciaria a las bodegas que le recepcionaron y elaboraron el mosto al Estado. "Le dimos un crédito de un peso por cada kilogramo de uva que recibían del Estado, al 7% de interés", destacó. En la reunión, la Cámara Vitivinícola también pidió la continuidad de los fondos rotatorios en el 2020 y el apoyo a los exportadores de vino, mediante la devolución de las retenciones. También volvieron a insistir ante Uñac con eliminar el cobro de tasas municipales por parte de los municipios en la boleta de la luz. En cuanto a los precios de la próxima cosecha, Leotta dijo que "aún es demasiado pronto para anticipar valores", y sostuvo que faltan dos meses para la cosecha y que evaluar qué impacto tendrá el déficit hídrico y el clima en la producción de uvas.

 

La ayuda estatal 2018

En la última vendimia el Estado provincial puso a disposición de toda la cadena vitivinícola alrededor de $1.500 millones. Entre esa ayudas se cuentan los créditos de cosecha y acarreo a tasa cero, la devolución de retenciones a los exportadores de vino, el Bonovit que fue un subsidio para pagar impuestos a los viñateros que destinaron su uva a la elaboración de vino para la exportación, sumado al aporte que hizo la provincia con fondos propios para combatir la lobesia botrana. Las bodegas también contaron con créditos a tasas blandas a través del Fondefin, en los bancos. Una de las ayudas inéditas fue el programa de devolución de retenciones para exportaciones de vino al bodeguero y un subsidio al productor que destinó su uva a la elaboración para la exportación. Concedió un subsidio a la bodega de $3 por cada dólar exportado, y al productor, $1 por cada kilo de uva destinado a elaboración. La condición fue que el vino fuese de origen sanjuanino y que el precio mínimo pagado por kilo de uva al productor no fuese inferior a $5.

 

La creación de Fiduciaria San Juan

El 19 de abril de 2017 nació una sociedad anónima inédita en San Juan. Se trata de Sociedad Anónima con Participación Estatal Mayoritaria (SAPEM), con un capital inicial de 6 millones de pesos integrado mayoritariamente por la provincia y el 3% por privados. El objetivo fue apuntar a proyectos de desarrollo productivo.