La adopción de criptomonedas está ganando terreno en la mayor parte de la economía mundial, pero el Bitcoin es el motor principal. Actualmente es la criptomoneda más popular y destacada en términos de capitalización de mercado. Aunque existen miles de monedas digitales, el Bitcoin es la moneda de reserva del sector que los inversores utilizan como referencia para determinar los movimientos de precios de otras criptomonedas y las condiciones del mercado. 

Al igual que otras monedas virtuales, el Bitcoin es una moneda especulativa con una volatilidad mayor que la del dinero fiduciario. Sin embargo, ha ascendido rápidamente, superando a todas las clases de activos tradicionales, incluidos el oro y la plata. El Bitcoin ha superado incluso a la moneda de reserva mundial, el dólar estadounidense, a pesar de sus fluctuaciones de precio. Entonces, ¿qué hace que el Bitcoin sea un macroactivo tan influyente? Este artículo explica por qué el Bitcoin representa una nueva clase de activos.
 

Potencial de inversión

Los inversores y particulares que adquieren capital en Bitcoin sin duda ganan exposición a ese activo. Los intercambios de criptomonedas, como Bitcoin Era, han informado constantemente un aumento en los volúmenes diarios de negociación de Bitcoin. A partir de 2016, muchos criptointercambios informaron de volúmenes de negociación diarios promedio de Bitcoin de mil millones de dólares. Bitcoin también tiene casi la misma liquidez que el mayor ETF de oro y tres veces más que el ETF de Vanguard, aunque almacenan relativamente más activos que el primero. 

Las estadísticas anteriores indican que Bitcoin podría ser un activo extremadamente líquido con el tiempo, adecuado para los traders. La creciente accesibilidad global de Bitcoin también repercutiría en una mayor liquidez que los activos centralizados, como el oro, que sólo se negocian en Estados Unidos y Singapur. Algunos analistas predicen que los inversores internacionales poseerán más criptomonedas que acciones de empresas que cotizan en bolsa en el futuro.
 

Ambiente político y económico

Bitcoin también se diferencia de otras clases de activos importantes en términos de valor, gobernanza y utilidad. Una de las razones por las que es más valioso que las monedas tradicionales es que puede facilitar todas las transacciones financieras. Bitcoin permite a las personas transferir y recibir dinero en todo el mundo de forma más rápida, segura y con menores costes que el dinero fiduciario. Es un activo exclusivamente digitalizado y basado en el consenso, ideal para el mundo cada vez más digital y socialmente conectado en el que vivimos hoy. 

Bitcoin funciona con un protocolo de Blockchain, apoyado por una red descentralizada de ordenadores. Su oferta no puede superar los 21 millones de tokens. Esto es lo contrario de las monedas fiduciarias, cuyas aplicaciones y oferta están sujetas a influencias gubernamentales e institucionales. En lugar de intermediarios, la cadena de bloques de Bitcoin verifica y valida las direcciones de los usuarios y los registros de las transacciones en un libro de contabilidad digital público, lo que garantiza una mayor transparencia y menores costes de transacción. 

Las aplicaciones de Bitcoin son muy diferentes a las de otros activos. Muchos traders, inversores y particulares utilizan actualmente Bitcoin como depósito de valor y método de pago. Además, también puede facilitar los contratos autoejecutables, principalmente a través de Blockchain. La idea de los contratos inteligentes no existe en otras clases de activos o bienes inmuebles, lo que da a Bitcoin una ventaja competitiva única.
 

Independencia de precio

Quizás la razón principal por la que muchas empresas e inversores incluyen el Bitcoin en sus carteras es que su precio no tiene correlación con ningún otro activo. Múltiples estudios han establecido que Bitcoin tiene una correlación casi nula con los rendimientos de los activos tradicionales. Su precio es el más desvinculado de otros movimientos de precios de las clases de activos convencionales. Esto es importante para los inversores, ya que ofrece una mejor protección contra los riesgos inflacionistas. Aunque el Bitcoin ha sufrido máximos y mínimos históricos en el pasado, ha demostrado ser más resistente a la inflación que los activos tradicionales. La disminución de la oferta de Bitcoin y la creciente demanda también le permiten mantener un mayor poder adquisitivo a lo largo del tiempo. 

En general, Bitcoin tiene varias características únicas que lo convierten en un rival más fuerte que la mayoría de los activos tradicionales. Sin embargo, la influencia más significativa de Bitcoin como macroactivo proviene principalmente de su independencia de precios, su alta liquidez y su red descentralizada.