Las boletas de la tasa de comercio en el departamento de Chimbas ya comenzaron a llegar con incrementos tan abultados que los empresarios no pueden digerir. Fiambrerías, autoservicios, lomotecas y carnicerías, entre otros, están recibiendo boletas con fuertes aumentos, algunos de los cuales trepan hasta el 4.588%, muy lejos de la suba del 200% que habían anunciado con el argumento de que hace 7 años (desde 2013) que no ajustaban los valores. La Cámara de Comercio ya hizo el reclamo a las autoridades municipales, e incluso han participado en dos reuniones de negociación. Pero temen que la medida no se revea, o se le baje poco; y tras hacer consultas comparativas con otras cámaras comerciales, salieron a denunciar una medida que consideran "exagerada en medio de la crisis económica que vive el sector, con la caída del consumo". Ayer, tras una reunión entre los comerciantes, calificaron en forma unánime de ""impresionantes" e "imposibles de pagar" los valores que se pretenden cobrar en Chimbas este año. ""Estamos asustados, desesperados; no sabemos cómo manejar esta situación", admitió Marcelo Rosas, presidente de la Cámara de Comercio de Chimbas. A su lomoteca le llegó una boleta por $25.856, cuando el año pasado pagó 786,44, es decir, una suba de 3.187,73%. Mostró además la boleta de una rotisería pequeña de la zona, donde la tasa pasó de $393,60 a $18.453, un aumento nada menos que del 4.588,52%. En el caso de Rolando Pérez, que tiene un autoservicio en Rodríguez y Azcuenaga, el año pasado pagó un canon anual en un pago por $1.981,33 y ahora la boleta le llegó por $71.120, un incremento del 3.489,51%. ""Estamos al borde de cerrar. Nuestro margen de renta es del 20% pero aquí la mayoría de la venta es con tarjeta social o plan alimentario, y como pasan por el banco nos descuentan aranceles del 7%. A eso hay que sumarle la inflación, de un 3% o un 5% mensual, y con lo que nos queda hay que pagar energía, leyes sociales, impuestos provinciales", explicó. A su lado, José Fredes, dueño de una fiambrería, reflexionó que le conviene cerrar y abrir en otro departamento. ""Quedarían 30 empleados en la calle, el intendente parece que no se da cuenta que estamos en crisis", se quejó el comerciante que también recibió una boleta por $71.120.
Otro ejemplo es el de Víctor Vera, que tiene un almacén barrial en Salta y 25 de Mayo, y el año anterior pagó $494 y ahora le cobran $10.135, una suba de 1.951,62%. ""Sabemos que era poco lo que pagábamos, pero este golpe se siente mucho, tendría que haber sido más gradual", dijo cerca suyo Roberto González, que tiene una fiambrería y recibió un aumento "bajo" frente al resto, de 813%: su boleta pasó de $369 en 2019 a $3.369 este año.
Rosas, el presidente de la Cámara comercial, pidió al municipio que se cobren tasas similares a las de comercios del mismo porte en otros departamentos.""Un supermercado en Rivadavia paga $12.500 anual, y Myriam, en Capital, $12.700, mientras que a uno de Chimbas le quieren cobrar $90 mil, ¡es terrible!", denunció. Destacó que esto sucede ""cuando el Presidente ha congelado los impuestos por 180 días por la crisis", y agregó que ha dado intervención a la Federación Económica, de quien la cámara comercial forma parte.
- Los industriales
La industria chimbera también atraviesa el mismo problema que los comerciantes, al haber recibido subas desmesuradas de la tasa comercial, y desde el directorio de la Unión Industrial de San Juan manifestaron la ""preocupación" que hay entre sus asociados. No obstante, explicaron que han tenido muy buena recepción por parte de las autoridades del municipio, las negociaciones están en un "cuarto intermedio" y están esperanzados en que se revea la medida. ""Esperamos resultados acordes a la necesidad de apoyar fundamentalmente la producción y a las industrias para que puedan seguir trabajando", dijeron. Hay casos de firmas que el año pasado pagaron una tasa de $1.200 y ahora les llegó $168.000