El sector de los combustibles vive horas de tensa calma tras la escalada del dólar por arriba de $ 60. Mientras las petroleras esperan una estabilización del billete verde para definir el ajuste en los surtidores, el despacho de naftas y gasoil es habitual y está normalizado.
“Los camiones salieron normalmente y hay pleno abastecimiento”,aseguró Gabriel Bornoroni, de la federación de expendedores de Córdoba. “Las petroleras informaron que con este dólar que sube y baja no tienen estabilidad para saber si se actualizan o no” los precios, agregó el dirigente empresario a Ámbito.
Dos de las compañías productoras de hidrocarburos más importantes del país coincidieron en que por ahora “no hay novedades” en los precios.
Uno de los temores tras la disparada del tipo de cambio era el congelamiento preventivo de la comercialización de combustibles, algo que no ocurrió. El valor actual del litro de Nafta Súper tiene un atraso de por lo menos 20%.
El consuelo en el sector es el crudo Brent, el de referencia para el mercado doméstico. La semana pasada el barril osciló entre u$s57 y u$s58. Este martes subió casi 3% a u$s61,34, aunque sigue lejos del récord de u$s 85 de octubre de 2018.
“Las petroleras dicen que van a esperar a ver qué pasa con el dólar y después van a tomar una decisión en base a cómo quede el tipo de cambio y si se actualiza”, señaló el cordobés Bornoroni.
“Por el momento hay tranquilidad en el sector, todas las estaciones están abastecidas, los camiones salieron y no hay una posibles actualizaciones en lo inmediato. Hay que ver a qué precio se estabiliza el dólar y después se tomará una decisión”, remarcó.
Fuente: ambito.com