¿Cómo se llamaba ella? ¿Cerré o no la puerta con llave? ¿En qué año me casé? ¿Y el cumpleaños de Rosita era el 24 o el 16?

Cuando comienzan algunos olvidos y observamos que sucede de manera frecuente, es recomendable detenerse a profundizar en las causas de las “fallas” en la memoria. Estas pueden deberse a un sinfín de motivos: dificultades en la atención, tristeza, falta de motivación, exceso de trabajo, entre otros. El neurólogo Facundo Manes explica: “Hay que recordar que en la memoria existen tres etapas: atender algo, consolidar la información y evocarlo. Muchas veces la gente cree tener problemas de memoria, cuando lo que tienen es problemas de atención y si no atendés, no podés recordar”.

Entonces, ¿qué es la memoria?

La memoria es la habilidad que nos permite fijar en el cerebro las experiencias y la información acumulada a lo largo de la vida. De ella también depende la posibilidad de recuperar estos datos cuando los necesitamos. Los contenidos se crean en la memoria a partir de un proceso de aprendizaje. La memoria es un complejo proceso sin el cual no podríamos hablar, escribir, servir un café o andar en bicicleta. Cada una de estas acciones involucra un tipo distinto de memoria que pueden clasificarse según el contenido (de aprendizaje, de orientación, de procedimiento) o según el tipo de adquisición (memoria a corto o largo plazo).El engranaje de la memoria opera como una cadena de articulaciones. La secuencia se inicia en las percepciones captadas por los sentidos, que transmiten sus mensajes al sistema nervioso central. La información queda allí, al servicio de cualquier acción, motora o intelectual.

Ejercicios para estimular la memoria en tu cotidianidad.

* Cuando se esté realizando una acción, es importante concentrarse en lo que se está haciendo en ese momento.

* Prestemos atención en el aquí y ahora. Sentir los aromas, los sabores, los sonidos que vamos absorbiendo.

* Meditar.

* Mirar una película y comentar la trama.

* Hacer cuentas mentalmente.

* Si sos diestro, utilizá la mano izquierda y viceversa. Ya sea para peinarse, comer, lavarse los dientes.

* Mirar los objetos que hay en una habitación o en un cajón y después tratar de escribir los que recuerdes.

* Utilizar agenda y calendarios.

* Jugar es imprescindible para el cerebro (juegos de mesa o ingenio, ajedrez, dominó, rompecabezas, sudoku).

* Decir los meses del año ordenados alfabéticamente.

* Decir el número de celular o del DNI, de atrás para adelante.

* No utilizar siempre el mismo camino para ir a trabajar o para ir a la casa de un amigo.

* Realizar actividades que nunca hayas probado (yoga, teatro, cerámica, pintura, fotografía).

* Cambiar el orden de los objetos de tu hogar. Cuando uno ya sabe dónde está cada objeto, es porque el cerebro ya construyó un mapa. Romper esquemas.

* Leer en voz alta.

* Realizar alguna actividad física.

* Tomar cinco cartas de un mazo, durante 2 minutos, darlas vuelta y luego tratar de recordarlas.

* Es necesario dormir por lo menos 8 horas, esto ayuda en la consolidación de la memoria.

* Hacer listas, es una herramienta que tenemos a mano y ayuda a descargar todos los pendientes.

* Poner por escrito alguna conversación qué hayas escuchado.

* Vaciar la mente y escribir todo lo que se tiene en la cabeza. Es útil tener un diario.

* Sentarse en la plaza o en el jardín y prestar atención a los sonidos que escuchas y luego anotarlos.