“No sabremos lo que podemos llegar a ser, hasta que no sepamos lo que somos capaces de hacer”, sentenció el educador y conferencista británico Ken Robinson.

¿Qué tenés para aportar al mundo?

Desde mi posición como orientadora y facilitadora de procesos de Orientación y Reorientación Vocacional, lo que sugiero es que busquemos dentro de nosotros cuál es nuestro diferencial, que descubramos qué nos hace distintos. Es importante que tengamos en claro que no todos servimos para todo, pero todos servimos para algo. Encontrar eso es la clave de vivir.

La búsqueda es hacia adentro y hacia afuera.

Es importante iniciar un proceso de autoconocimiento para saber lo que nos gusta, pero también es clave poder probar haciendo, para de esta forma darse cuenta si en el “haciendo” nos gusta y tenemos habilidad en esa determinada actividad.

Empezá a pensar cómo y por dónde empezar. “Cualquier largo viaje empieza con un pequeño paso”, dejó escrito el filósofo chino Lao Tse.

Aquí les dejo algunas pregunTITAS para reflexionar:

* ¿Qué tengo yo que el mundo puede necesitar?

* ¿Qué quiero aprender?

* ¿Qué me interesa?

* ¿Qué me da curiosidad?

* ¿Qué cosas me salen bien?

* ¿Cuál es el estilo de vida qué quiero tener?

* ¿Qué me motiva?

* ¿Qué es lo que me da disfrute hacer?

* ¿Qué páginas de Instagram sigo?

* ¿Hay alguna actividad que me guste tanto que me haga perder la noción del tiempo?

* ¿Dónde me veo? ¿Haciendo qué?

* ¿Hay alguna causa por la que me gustaría luchar?

* ¿A qué youtubers sigo?

* Si mi vida fuera como una revista, ¿qué temas trataría?

* CarTITA: escribile una carta a tu yo del futuro.