Los activos de Argentina cotizaban ayer por recompras de posiciones en línea a la oxigenación global de los mercados, tras el derrumbe en la ronda previa por temores a una eventual recesión económica en Estados Unidos ante el reciente aumento del desempleo.

El “lunes negro”, liderado por Japón, fue seguido de cerca en todo el mundo financiero, donde el “cepo” cambiario que tiene el sistema argentino jugó a favor con un recorte de volatilidad por la intervención del banco central (BCRA) y la imposibilidad de movilizar libremente los capitales.

“A la Argentina no le pega fuerte por el “cepo” (…). “El plan del Gobierno está anclado al arribo de capitales”, comentó el analista económico Matías Battista.

El índice líder S&P Merval de la bolsa porteña subía un 1,6% a las 1403 GMT, luego de anotar un derrumbe de casi el 7% de manera intradiaria el lunes, cuando cerró con una caída del 0,9%.

A su vez, el riesgo país elaborado por el banco JP.Morgan cedía 11 puntos básicos a 1.641 unidades, contra un nivel superior a los 1.700 puntos alcanzado el lunes, el máximo en cinco meses.

“El fuerte y rápido deterioro de los mercados bursátiles luce exagerado para la dinámica de los fundamentos. La economía no está colapsando y los varios bancos centrales relevantes están en un proceso de relajamiento de sus políticas monetarias”, remarcó la consultora Delphos Investment.

“Aún así, el ajuste de estos días no dejó valuaciones regaladas, ni fue lo profundo como para reflejar una situación de pánico indiscutible”, agregó.

Las bolsas a nivel mundial se recuperan
Las bolsas mundiales subían ayer martes en un clima de nerviosismo, ya que la incertidumbre generada por la agresiva ola de ventas del día anterior pesaba sobre el ánimo de los inversores, pese a que los responsables de los bancos centrales dijeron todo lo que debían para calmar los nervios.

Durante la noche, el Nikkei repuntó un 10% en Tokio, lo que supuso un alivio inicial tras la caída del 12,4% del lunes, la mayor diaria desde el “lunes negro” de 1987.

El paneuropeo STOXX 600 oscilaba entre una pérdida diaria del 0,4% y una ganancia del 1%, mientras que los futuros bursátiles estadounidenses se mostraban volátiles y mejoraban cerca de un 1% en su última cotización.

El índice S&P 500 cedió un 3% el lunes y el Nasdaq se desplomó un 3,43%, ampliando una reciente liquidación, ya que el temor a una posible recesión en Estados Unidos asustó a los mercados mundiales.

El rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años volvía a situarse en el 3,84%, tras haber retrocedido hasta el 3,667% en un momento dado.

“Despertarse por la mañana y descubrir que Japón ha bajado entre un 10% y un 12% asusta a la persona más cuerda del mundo, así que es comprensible que la gente huya”, dijo Chris Beauchamp, estratega jefe de mercados de IG.

“Por otro lado, creo que la gente se dejó llevar un poco ayer y siempre parece muy dramático en ese momento. Es normal ver debilidad en esta época del año. La pregunta es: ¿fue suficiente para reajustar los mercados o va a haber más?”, agregó.

Las autoridades de la Fed trataron de tranquilizar a los mercados y la presidenta de la entidad en San Francisco, Mary Daly, dijo que es “extremadamente importante” evitar que el mercado laboral se incline hacia una recesión. Daly dijo que está dispuesta a recortar los tasas si es necesario y que la política debe ser proactiva.

Por Jorge Otaola y Lucila Sigal
Agencia Reuters