En el contexto de agitación social y polarización que vivió y vive actualmente Estados Unidos, los magnicidios tienen su historia en el país del norte. Hace unos días se intentó un hecho de este tipo cuando le dispararon al expresidente y candidato a la presidencia por el partido Republicano, Donald Trump.

El magnicidio como definición es la muerte violenta dada a una persona poderosa o con un cargo importante, usualmente una figura política. La democracia más importante del mundo tiene una triste historia en contra de sus políticos. Cuatro Presidentes asesinados desde su fundación como Nación:

>Abraham Lincoln
Lincoln se reunía frecuentemente con Ulysses Grant hacia el final de la guerra. Durante su última reunión, Lincoln invitó al general Grant a un evento social para aquella misma tarde, pero este decidió a último segundo viajar a Filadelfia y no asistir a la puesta en escena. La noche del 14 de abril de 1865, un viernes, sin el general ni su esposa, Lincoln y Mary Todd salieron para asistir a una representación en el teatro Ford. La obra era “Our American Cousin”, una comedia musical de Tom Taylor.

Cuando Lincoln se sentó en el palco, John Wilkes Booth, un actor de Maryland, residente en Virginia y simpatizante del Sur, apareció por detrás y disparó un único tiro con una pistola Derringer de bala redonda a la cabeza del presidente, tras lo cual gritó ¡Sic semper tyrannis! (expresión en latín que significa “así siempre a los tiranos”).

El presidente, mortalmente herido y tras ser atendido por el joven médico militar Charles August Leale, que se encontraba en el teatro, fue llevado a una casa atravesando la calle donde entró en coma; su agonía duró nueve horas. En la actualidad, sus restos descansan en el cementerio de Oak Ridge en Springfield (Illinois).

>James Abram Garfield
El 2 de julio de 1881, en la estación de tren de Washington, el abogado Charles Jules Guiteau, un buscador de cargos y prebendas desengañado por la firmeza de James Garfield, quien no le había concedido un puesto consular que había solicitado, disparó contra el presidente dos balas que no llegaron a herir ningún órgano vital.

Herido, Garfield permaneció acostado en la Casa Blanca durante 70 días. Los médicos, con el pretexto de encontrar una de las balas fueron transformando una herida de unos milímetros en una herida grave.

El 6 de septiembre Garfield fue llevado a la costa de Nueva Jersey. Por unos días parecía haberse recuperado, pero el 19 del mismo mes falleció por culpa de la infección y de la hemorragia interna que le causaron los médicos. Fue sucedido por su vicepresidente, Chester Alan Arthur.

>William McKinley
Fue el vigésimo quinto presidente de los Estados Unidos. El hecho sucedió el 6 de septiembre de 1901, cuando fue tiroteado y fatalmente herido en el interior del teatro Templo de la Música durante la Exposición Panamericana, realizada en Búfalo (Nueva York). Saludaba al público cuando Leon Czolgosz, un anarquista, le disparó dos veces en el abdomen. McKinley murió el 14 de septiembre, de la gangrena causada por las heridas de bala.

>John F. Kennedy
El presidente recibió varios impactos de bala en la calle Elm de Dallas (Texas) mientras viajaba en un Ford Lincoln Continental Convertible, a las 12:30 p. m. el 22 de noviembre de 1963, durante su gira política por el estado de Texas. Fue declarado muerto media hora más tarde.

Lee Harvey Oswald, el supuesto asesino, fue arrestado en un teatro 80 minutos después de los disparos. Oswald fue acusado por el homicidio del presidente.

El 29 de noviembre, Lyndon B. Johnson creó la Comisión Warren -presidida por el juez de la Suprema Corte Earl Warren- para investigar el asesinato, la cual concluyó que Oswald actuó solo, pero sus conclusiones siguen siendo objeto de debate, tanto académico como popular.

>Robert Kennedy
El senador de los Estados Unidos fue asesinado en la madrugada del miércoles 5 de junio de 1968 en el Hotel Ambassador de Los Ángeles durante las celebraciones de su exitosa campaña en las primarias de California en su intento de obtener la nominación demócrata para la presidencia de los Estados Unidos. El asesino fue un joven inmigrante palestino de veinticuatro años de edad llamado Sirhan Sirhan, que aún sigue en prisión.

>Ronald Reagan
Sufrió un intento de asesinato el 30 de marzo de 1981, a los setenta días de que Reagan asumiera la presidencia de los Estados Unidos. A su salida de una conferencia en el Washington Hilton Hotel en Washington D. C., Reagan y otras tres personas fueron tiroteados y heridos por John Hinckley Jr.

Reagan no recibió el impacto directo de ninguna bala, solo un rebote, lo que le produjo una leve herida superficial en el pecho que no le causo ninguna herida. Reagan tenía 70 años. Este atentado no tuvo motivos políticos sino la obsesión enfermiza de Hinckley por la actriz Jodi Foster.

> Otros atentados
La historia del país dice que hubo otros ex presidentes y políticos que quisieron asesinar: Franklin D. Roosevelt, el 32do presidente, Harry S. Truman, 33er president, Gerald Ford, el 38vo presidente, George W. Bush, el 43er president y George C. Wallace, candidato presidencial. Donald Trump, el sábado 13 de Julio de 2024. Intentaron asesinar al ex presidente durante un acto de campaña en Pensilvania: resultó herido por un disparo. El candidato republicano fue custodiado rápidamente por su equipo de seguridad y retirado del escenario con sangre en la oreja derecha. “El ex presidente está a salvo”, informó el servicio secreto. El agresor fue abatido y un seguidor del ex mandatario también murió.

> Qué es el Servicio Secreto y su función en los EE.UU.

El Servicio Secreto de los Estados Unidos (en inglés: United States Secret Service; acrónimo: USSS) es una agencia federal de los Estados Unidos que cumple con la función de llevar a cabo investigaciones criminales y proteger a los líderes políticos de Estados Unidos (incluyendo al Presidente de los Estados Unidos), a sus familias y a los jefes de Estado o de gobierno que estén de visita, y que está bajo cargo del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos desde el año 2003.

Anteriormente dependía del Departamento del Tesoro. Se fundó para luchar contra la entonces extendida falsificación de moneda estadounidense. Ya en el siglo diecinueve, debido a que un tercio de la moneda en circulación estaba siendo falsificada, el Departamento del Tesoro decidió crear el 5 de julio de 1865 en Washington D. C., la “División de Servicio Secreto” de ese organismo, para reprimir la falsificación de dinero. En ese momento no existía suficiente personal para investigar todos los delitos del tipo federal, por lo que el Servicio Secreto fue utilizado para investigar desde los asesinatos, hasta los juegos de azar ilegales.

El Servicio Secreto fue la primera agencia nacional de inteligencia y contraespionaje de los Estados Unidos. Actualmente ya no cuenta con estas funciones, que pertenecen al FBI desde su creación en 1908.

El Servicio Secreto de los Estados Unidos, no es su función el ser secreto, actualmente cuida y protege, las espaldas a los políticos estadounidenses. Una noble labor, en estos tiempos turbulentos en los que vivimos.

Por el Lic. Fernando A. Ocampo Bravo