Los 2,9 millones de pymes existentes en España representan el 99,8 % de las empresas del país y generan el 62,1 % del empleo empresarial, según datos publicados por el centro de análisis Funcas con motivo del día mundial de las microempresas y las pymes.
Ambos porcentajes coinciden con los registros europeos medios, donde los 24,3 millones de pymes activas en la UE-27 representan el 99,8 % de las empresas y emplean al 64,4 % de los trabajadores del sector empresarial, según los datos del último informe anual de la Comisión Europea.
El informe de Funcas define a las pymes como aquellas empresas con menos de 250 asalariados, incluyendo a trabajadores autónomos propiamente dichos.
Las diferencias entre España y otros países europeos, añade el estudio, son más ostensibles cuando se compara la aportación de las distintas clases de pymes.
Mientras que en los Países Bajos, la tercera economía de la UE-27 con mayor renta per cápita, más de la mitad de las pymes (52,7 %) pertenecen a sectores intensivos en conocimiento o de alta o media tecnología, la proporción correspondiente a España apenas supera un cuarto (25,8 %).
Tres de cada cuatro pymes pertenece a sectores poco cualificados.
España es, junto con Portugal y Bulgaria, uno de los países europeos con porcentajes más altos de pymes en sectores poco intensivos en conocimiento o de baja tecnología.
El peso de las pymes que operan en estos sectores de baja cualificación (74,2 %) casi triplica al de las que ofrecen productos y servicios en sectores intensivos en conocimiento o de alta o media tecnología.
Las empresas en sectores menos intensivos en conocimiento o menos innovadores, señala el estudio, tienden a generar más empleo que valor añadido, en detrimento de la productividad, una cuestión que “preocupa especialmente a las pymes españolas”.
Desde la patronal Cepyme recuerdan también este jueves la importante contribución de estas empresas y lamentan que sus necesidades no son tenidas en cuenta al abordar políticas y reformas “que, en numerosas ocasiones, suponen nuevas cargas administrativas e incremento de costes para las empresas, y ponen en riesgo su viabilidad”.
Por Agencia EFE