La etóloga y conservacionista inglesa Jane Goodall cree que aún existe una ventana de tiempo para frenar el cambio climático e insta a tomar acciones como la transformación de estilos de vida que considera insostenibles. Esto queda en evidencia en las épocas extremas de temperaturas como el verano, que se hacen insostenibles en cualquiera de los hemisferios, tanto el Norte como el Sur.

“Tenemos una ventana pero se está cerrando”, dijo la científica de 90 años en una entrevista con medios locales en la embajada británica en Argentina, adonde viajó en el marco de una gira por Latinoamérica. “No estamos usando nuestros cerebros colectivos para pensar una solución y si esa solución va a generar otro problema en otra área”, agregó.

“Una cosa que podemos hacer para frenar el cambio climático es reducir estilos de vida insostenibles. Podemos empezar a pensar en lo que necesitamos, no solo en lo que queremos, podemos empezar a pensar en los residuos, podemos empezar a pensar en distintas formas de agricultura”, afirmó con una vitalidad admirable.

Goodall, mensajera de la paz de Naciones Unidas y fundadora del Instituto Jane Goodall, saltó a la fama en la década de 1960 por sus investigaciones innovadoras sobre chimpancés en el Parque Nacional Gombe, en Tanzania, que revolucionaron la comprensión del comportamiento animal. Desde entonces su trabajo se ha expandido hacia la educación y el activismo ambiental, impulsando programas como “Tacare” y “Roots and Shoots” (Raíces y Brotes), que funciona en 70 países e involucra a jóvenes en actividades de conservación y desarrollo comunitario.

-Esperanza en los jóvenes
A pesar de los enormes desafíos actuales como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la pobreza, Goodall dijo que tiene esperanza en los jóvenes, en el intelecto humano y en la resiliencia de la naturaleza y afirmó que aún hay tiempo para convencer a los poderosos, en una época en la que muchos sienten que no hay nada que puedan hacer para revertir el daño ambiental. “Muchas veces cuando conoces a una persona que piensa diferente a ti, no tiene sentido discutir. Entonces lo que haces es tratar de llegarle al corazón. ¿Cómo llegas al corazón? Con historias. Las historias cambian a las personas. Tenemos que crear un mundo donde corazón y cabeza trabajen en armonía. Así es como tendremos el mundo mejor que necesitamos”, afirmó.

-Un mensaje de esperanza
Goodall, quien vuelve dos veces por año a su “paraíso” en África y planea seguir recorriendo el mundo para difundir su mensaje de esperanza, dijo que su próxima aventura será morir. “Mi próxima gran aventura a los 90 años va a ser morir. No sé si hay algo o nada después; si no hay nada, se terminó. Si hay algo, no puedo pensar en una aventura más grande que descubrir qué es. Tiendo a pensar que hay algo debido a experiencias que he tenido, debido a experiencias que otras personas han tenido, experiencias muy poderosas”, concluyó.

Por Lucila Sigal y Nicolás Misculin
Agencia Reuters