España oficializó su reconocimiento de Palestina como Estado, una decisión que provocó la indignación de Israel, que acusó al presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, de ser “cómplice de incitación al asesinato del pueblo judío”. La medida no tendrá repercusiones inmediatas en la guerra en Gaza, pero eleva la presión internacional sobre Tel Aviv para que suavice su devastadora respuesta al ataque terrorista de octubre pasado.

El reconocimiento por parte de España del Estado de Palestina, al que también se han sumado Irlanda y Noruega, ha tensado aún más las relaciones diplomáticas entre España e Israel hasta el punto de que la plataforma Sumar, que integra el Gobierno de coalición junto al Partido Socialista, pidió su ruptura total.

El presidente del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, afirmó ayer que Palestina “ha existido, existe y existirá” y aseguró que hay “coherencia” en la postura del Gobierno en el conflicto ucraniano y el que se vive en Oriente Medio.

Desde Sumar, sin embargo, creen que España no puede “mantener relaciones diplomáticas” con Tel Aviv, según manifestó el portavoz del partido y ministro de Cultura, Ernest Urtasun, tras los ataques del Ejército israelí al campo de desplazados de Rafah (Gaza).

Es la primera vez que Sumar reclama la ruptura de relaciones diplomáticas con el Estado de Israel y lo hizo después de que la vicepresidenta segunda del Gobierno y líder de la formación, Yolanda Díaz, pidiera este lunes que se llame a consultas “de forma inmediata” a la embajadora de España en Tel Aviv.

Tras el anuncio de España de reconocer al Estado Palestino (tal como ya hacen cerca de 140 países en el mundo), el Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel ordenó al Consulado español en Jerusalén dejar de prestar servicios consulares a los palestinos “residentes bajo la Autoridad Palestina”, es decir, en Cisjordania ocupada, desde el 1 de junio.

“Estamos en el año 2024, se acabaron los días de la Inquisición. Hoy los judíos tenemos un Estado soberano e independiente y nadie nos obligará a convertir nuestra religión ni amenazará nuestra existencia. A quien nos haga daño, le haremos daño”, dijo ayer el ministro israelí de Asuntos Exteriores, Israel Katz.

Empoderamiento a Hamás

El líder del opositor Partido Popular (derecha), Alberto Núñez Feijóo, acusó al Gobierno español de “empoderar” a la organización terrorista Hamás al reconocer a Palestina como Estado.

“No me siento identificado con esa decisión, estando a favor de los dos estados. En este momento le vamos a hacer más daño al pueblo palestino que beneficio y vamos a empoderar a Hamás, que me parece el mayor disparate, porque el mayor enemigo del pueblo palestino es Hamás”, enfatizó Feijóo en una entrevista radiofónica.

Paralelamente, desde Bruselas, el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, pidió a sus homólogos de la Unión Europea (UE) que adopten “las medidas adecuadas” para obligar a Israel a cumplir con la decisión de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que la semana pasada le obligó a detener la ofensiva en Rafah.

Españoles a favor del reconocimiento

El reconocimiento del Estado de Palestina está secundado por el 78 % de la población, según una encuesta del Real Instituto Elcano, que indica además que un 71 % considera que Israel está cometiendo un genocidio en Gaza.

Según esta encuesta, hasta un 60% de los españoles apoya la solución de los dos Estados, uno israelí y otro palestino, como solución al conflicto en Oriente Medio, un 20% más que hace dos años, mientras que la mitad de los españoles responsabiliza a Israel por la actual situación de guerra que atraviesa Gaza, un 34% culpa a los dos por igual y un 16% a Palestina.

Por Agencia EFE