Felices. Así estaban ayer en la siesta el gobernador de San Juan Sergio Uñac y el diputado nacional y presidente del PJ sanjuanino, José Luis Gioja. Y no es para menos, ya que lograron juntar a 13 mandatarios del Frente para la Victoria en momentos clave de la vida política e institucional del país: cuando se debate quién se hará cargo del partido político opositor con mayor representatividad y cómo, ese mismo grupo de dirigentes se para frente al presidente Mauricio Macri. A consecuencia de ese encuentro y haciendo una rápida lectura de política nacional, se puede afirmar que lo de ayer representó una eficaz respuesta del peronismo a la intención de Sergio Massa de querer gobernar el partido desde el acuerdo con Macri. El Presidente deberá chequear con más detenimiento si es verdad que Massa puede presidir el PJ. En cuanto a la reorganización del peronismo, surge la gran posibilidad, admitida por varios ayer, de que Gioja termine conduciendo este nuevo período de transición que no tiene fechas aún, pero que tiene un par de posturas bien definidas. ¿Cómo juega Uñac en todo esto? En tándem con Gioja, es evidente. El Gobernador está dispuesto a ser punta de lanza del diputado nacional en la patriada sanjuanina. ¿Le hace falta a Gioja? Gioja no puede proponerse a sí mismo, necesita que alguien lo haga por él, mínimo tiene esa necesidad. Si todo se da como planean y si la relación entre ambos sigue como hasta ahora, pueden venirse momentos interesantes.
La respuesta no iba a tardar y llegó. Desde que Macri decidió viajar a Davos con Massa, hasta que lo mencionó como presunto líder del peronismo, los dirigentes de ese partido se prometieron una acelerada respuesta, y parece que ayer lo lograron. Se murmuró en los pasillos del Centro Cívico que Urtubey admitió ante un par de dirigentes en San Juan que fue un error aquella cena con el excandidato a presidente y Diego Bossio. ‘No te apurés‘, le aconsejaron en el edificio sanjuanino, y parece que asintió. El PJ le respondió a Massa con poder, con convocatoria, con unidad. Nadie se acordó ayer de Massa y no fue una casualidad, los Gobernadores están dispuestos a demostrar que ellos manejan la oposición, no Massa.
En ese contexto se puede decir que el PJ nacional está dividido en un par de ideas, ambas respecto de la relación con el presidente Macri: Juan Manuel Urtubey, gobernador de Salta y Jorge Capitanich, ex de Chaco y actual intendente de Resistencia, son quienes encabezan las posturas: el primero se acerca un poco más al Presidente, y el segundo prefiere el calor de lo poco que queda de La Cámpora y otras agrupaciones kirchneristas, mucho más proclives a la guerra que a la negociación con el mandatario nacional. Pero ninguno de los dos garantiza, hoy al menos, que el peronismo llegue sin lastimaduras a una nueva conducción. Y es ahí donde aparece José Luis Gioja. El sanjuanino ha sido elegido junto a Gildo Insfrán y a Urtubey para convocar al Congreso Nacional del PJ, organismo que tiene como meta la reorganización del partido. Gioja, según se desprendió ayer de la Cumbre en San Juan, podría personificar lo que algunos medios nacionales, como Ámbito Financiero por ejemplo, tildaron de ‘tercera vía‘. Es decir, un dirigente que puede aglutinar a los dos sectores sin generar más fisuras de las que ya hay. La gente que rodea al exgobernador de San Juan dice que si Gioja olfatea que su conducción puede desembocar en una elección de autoridades sin internas, sí aceptaría.
No hay que olvidarse de los contactos del exmandatario, que siempre ayudan. Por ejemplo, Rogelio Frigerio, hoy ministro del Interior de Macri, fue asesor de Gioja cuando el sanjuanino fue senador nacional y presidió la Comisión de Coparticipación. Frigerio junto a Horacio Caldanelli, otro dirigente del PRO quien también actualmente es funcionario del Gobierno nacional, aconsejaban al sanjuanino mientras se discutía la Ley de Coparticipación tan mencionada por estos días. Frigerio estuvo a punto de ir a saludar a Gioja el día que estuvo en San Juan, paradójicamente el mismo día que se armó la reunión peronista de ayer. Prefirió no hacerlo, más para cuidar las apariencias que otra cosa. Y eso sólo para dar un ejemplo, porque al ahondar un poco nomás en la vida política del sanjuanino se pueden encontrar muchísimas otras perlitas. El otro factor que ayuda a Gioja en su carrera pejotista es que ya no piensa en la Presidencia de la Nación, como alguna vez sí hizo. No es rival de nadie, como sí puede serlo Urtubey, por ejemplo. Es decir, darle el PJ a Urtubey sería como darle la mitad de la candidatura a presidente en 2019. Nadie lo va a hacer aún, es obvio.
Si la jugada sale como los sanjuaninos planean, a Uñac le conviene también. No es lo mismo pararse frente a las desconocidas oficinas nacionales con un as en la manga como la presidencia del PJ que hacerlo sólo con buenos modales. Uñac tuvo un bautismo de fuego ayer en el Centro Cívico al ser elegido por sus pares para comunicarse con Frigerio, tarea que se completará el miércoles cuando le toque protagonizar el encuentro entre los gobernadores y el funcionario nacional. Dicen que la respuesta del ministro político de Macri no tardó en llegar después de la llamada de Uñac. El gobernador de San Juan ya estuvo varias veces con el ministro, y San Juan es una de las pocas provincias que el rubio ya visitó en los pocos meses de gestión que lleva. En resumen, suma que Frigerio haya sido empleado de Gioja, pero también que Uñac ya lo haya visitado varias veces.
La tarea de Sergio será sencilla y compleja a la vez. Irá primero para prepararle el terreno a Gioja. Por ejemplo, antes del mitín en San Juan el Gobernador tuvo un par de reuniones en Capital Federal que ayudaron bastante. El pocitano se encontró con Urtubey, con Omar Perotti y con Julián Domínguez el viernes al mediodía. A ese mitín asistieron también dirigentes de peso del sindicalismo como Omar Viviani, de Taxistas, el jefe del sindicato de mecánicos, Ricardo Pignanelli y el de Ferroviarios, Omar Maturano. Hablaron justamente de lo que iba a ocurrir en San Juan el sábado y de la posibilidad de que Gioja conduzca este peronismo de transición. Es evidente que Uñac y Gioja han armado una agenda que se va cumpliendo a la perfección. Y tienen suerte: la reunión en San Juan se gestó por la acción de los sanjuaninos, pero también colaboró que el diputado nacional no puede viajar, porque aún se recupera de su última operación.
En resumen, ¿qué une y qué separa a Sergio Uñac y José Luis Gioja? Es la gran pregunta de todo el peronismo sanjuanino. Cómo se paran uno frente al otro, qué cosas encaran juntos y en cuáles están en desacuerdo, teniendo en cuenta que uno tiene el poder del voto, traducido en una Gobernación, y el otro, el del peronismo. Es una situación que no se da desde hacía doce años al menos, ya que ambos mandatos estuvieron durante mucho tiempo en manos de una sola persona. De esa situación surge una pregunta incómoda, que sonó mucho a fines del año pasado: ¿Es posible el ‘doble comando‘? En el caso de la Gobernación no, y Uñac ya lo ha demostrado. Y a partir de ahora se verá en el caso del PJ. ‘Doble comando no, pero juntos sí‘, suele graficar uno de ellos.

