–PRIMERA NOTA–

Existe un marcado desconocimiento de la población en cuanto al manejo del animal comunitario en la provincia de San Juan. Si bien las autoridades han implementado medidas de control zoonótico, esterilización y vacunación, y la provincia ostenta orgullosamente su definición de territorio no-eutanásico, los programas no han logrado aún el impacto poblacional esperado.

Analizando la problemática de los animales domésticos de compañía, cuando un gobierno decide redireccionar anacrónicas políticas de exterminio hacia las comprobadamente eficientes y éticamente sustentables basadas en la esterilización, vacunación y adopción, comienza a enseñar con el ejemplo; un ejemplo de no violencia, de respeto y cuidado por otras expresiones de la vida, de tolerancia hacia otras especies animales con las que convivimos. Justamente, tratándose de perros y gatos, animales a los que hemos incluido en nuestra sociedad hace miles de años y de esta manera interferido en su ciclo biológico, es que estamos obligados a responsabilizarnos.

Una arista de suma importancia para comentar es la de los perros y gatos sueltos, callejeros, sin dueño, comunitarios. Hasta el momento en el mundo han fracasado las políticas de captura y muerte simplemente porque no se ajustan a la biología de estas poblaciones.

Dos leyes ecológicas trabajan contra el éxito del exterminio: 1- La naturaleza detesta los espacios vacíos. El nicho vacío del exterminado se llenará rápidamente con la proliferación de la especie por ellos depredada o con la reocupación por otros individuos de la misma especie que llegan desde otras áreas. "Matar un perro o gato comunitario, además de cruel, es inútil". 2- Los mamíferos crían a sus hijos de un tamaño que varía según la disponibilidad del alimento. Entre mamíferos, cuando baja la competencia por el alimento se acelera la fecundidad de la población que sobrevive. Cada vez nacen crías de mayor tamaño.

Los perros y gatos callejeros deben ser castrados y devueltos a su lugar para evitar vacíos en el hábitat, respetando su dinámica ecológica.

El sistema Trap Neuter Return, en castellano: Atrapar Esterilizar Retornar, tiene por objetivo devolver al animal controlado sanitariamente a su lugar de origen, evitando de esta manera que otro animal con capacidad reproductiva ocupe el sitio. Se lo devuelve no sólo esterilizado, sino también con las vacunas correspondientes y desparasitado.

El Programa Mc Kee afirma: "Los perros sueltos no deben ser capturados (para depositarlos en un albergue o exterminarlos). El retiro de un animal de su ‘nicho’, ocasiona un vacío que rápidamente será ocupado por otro animal. Por ello, los animales castrados deben ser devueltos a su lugar de procedencia".

Es importante subrayar que se acaba de presentar una mirada sistémica a la problemática de la superabundancia de perros y gatos, arraigada en la base de la dinámica biológica de estas especies, su impacto en el medio ambiente, su relación ancestral con el humano, el papel que juega el Estado desde sus organismos de salud en la responsabilidad de dar una solución eficiente y ética, el necesario acompañamiento de la comunidad a estas medidas con el consecuente beneficio político, la escasa erogación frente a la ganancia que aporta el tratamiento de fondo, el convencimiento de que además se trata de un proyecto educativo, resumiendo: el beneficio de la comunidad toda, incluyendo a sus animales domésticos de compañía.

En relación con la exposición previa, nos referiremos a los animales comunitarios existentes en las inmediaciones del complejo habitacional "Patio de San Ignacio". Se trata de un conjunto de edificios de departamentos y locales comerciales ubicado en la intersección de calles Hermógenes Ruiz e Ignacio de la Roza. El mismo es abierto, y cualquier persona puede acceder a los espacios comunes diseñados, como su nombre lo indica, en forma de patio. Recordemos que una plaza urbana es cualquier espacio dentro de la ciudad en el que los elementos que lo definen son claramente visibles desde dentro de éste, y en el que el énfasis se encuentra en "estar allí", más que en moverse rápidamente por él. Trasladando el concepto de plaza al ámbito de lo privado, aparece el patio como espacio equivalente.

(*) Proteccionistas de Animales Unidos.