Israel, un país complejo y lleno de contradicciones, basa su estabilidad interna en la lucha contra un enemigo común: sus vecinos árabes, con los que mantiene un conflicto que tiene en vilo desde hace décadas al mundo y cuya resolución le puede crear más problemas que beneficios.

Esta es una de las ideas que contiene "Israel, crónica del país del Libro”, la nueva obra del periodista español Alberto Masegosa, en la que aborda la realidad de esta nación "creada por mandato divino”, en la que ha trabajado como corresponsal de la Agencia Efe durante los últimos cuatro años.

"Lo que ha unido a los diferentes sectores de Israel, desde los ultra-ortodoxos a los más ateos tras la creación de su Estado es el enemigo común y hay muchos analistas que creen que su desaparición y la llegada de la paz crearía tensiones políticas y sociales internas difíciles de superar”, asegura el periodista. Agrega que "se trata de un país que desde el principio ha estado en situación de guerra, no conoce otra realidad, y eso ha creado una dinámica belicista interna difícil de cambiar”. De ahí que existe la impresión de que esta circunstancia ha hecho que "en alguna medida, Israel tenga miedo a la paz”.

Masegosa, autor de otros cuatro libros en los que relata su experiencia como periodista en el África subsahariana, Marruecos, Irak o conflictos como el de Darfur, no cree en una pronta solución del conflicto palestino-israelí, lastrado por los radicalismos de ambos bandos que se retroalimentan e impiden avanzar hacia un acuerdo negociado. Ello, a pesar de que existen amplios sectores entre los israelíes y los palestinos partidarios de la coexistencia de los dos pueblos, pero que no acaban de imponerse en los sucesivos procesos electorales, que en los últimos tiempos han acabado por dar más voz los radicales en uno y otro bando.

El veterano periodista cree que Israel vive una especie de estado de esquizofrenia, al presentarse al mundo como el único país democrático de Oriente Medio y, al mismo tiempo, justificar su existencia y basar su filosofía interior en la Biblia, el libro

sagrado por antonomasia y donde Dios es el protagonista.

En su repaso por la historia del pueblo judío, a la que se acerca con una visión más periodística que literaria, como él mismo confiesa, Masegosa dice que los judíos al considerarse "el pueblo elegido, están obligados a merecer esa elección, a esforzarse más que los demás, lo que explica que en asuntos terrenales hayan tenido, en general, más éxito que otros pueblos”. "El problema es que, al final, históricamente han venido a convertirse en víctimas de su propio éxito”, apunta el autor de este libro que ha sido prologado por Enric González, corresponsal del diario El País en Jerusalén.