Mientras en el basualdismo se aprestan a competir en una interna Enrique Conti, Mauricio Ibarra, Rodolfo Colombo, Eduardo Cáceres y Wbaldino Acosta, entre otros, y si es que no hay más novedades esta semana, en el oficialismo acaban de cerrar con dos intendentes más: César Monla -Zonda- y José Castro -Angaco-, quienes con Daniel Albarracín, de Ullum, cierran el tándem de tres jefes comunales que llegaron con Roberto Basualdo, pero que en esta elección pedirán el voto a favor de los candidatos que elija José Luis Gioja, quienes serán anunciados a última hora del sábado 22 cuando venza el plazo de presentación de listas. Del grupo que llegó al poder en 2011 a Basualdo sólo le queda Marcelo Orrego de Santa Lucía, quien, a su vez, goza de excelente relación con Gioja. El santaluceño dice que se queda con Basualdo, y no quiere ni oír la idea de que cruzará el charco, lo que por ahora le da seguridad al senador. Igual, la frase de Orrego también la repitieron Monla, Castro y Albarracín varias veces. La noticia de los cruces, ¿cambiará algo entre los opositores? Basualdo deberá revisar estrategias.

"Hemos sobrepasado nuestro objetivo que era conseguir una intendencia", decía con algarabía Basualdo a eso de las 23 del día 23 de octubre de 2011 a DIARIO DE CUYO, en su búnker y luego de una elección que al final fue histórica para Gioja, llegando al 68 por ciento de los votos sanjuaninos. A pesar de la brutal diferencia, Basualdo no estaba errado ya que nunca antes había podido morder tanto a los hombres de Gioja en ningún nivel. La victoria significaba, al menos en los papeles, un piso desde donde empezar a crecer. Evidentemente algo pasó que el piso logrado se derrumbó y hoy Basualdo está donde estaba antes de la algarabía. ¿Por qué? La respuesta a esa pregunta compite con las más difíciles de la humanidad toda. Los que se van dicen que Basualdo no aparece por los departamentos, pero esa afirmación suena a chicana, porque el senador, se ve, destina tiempo y recursos girando en los departamentos. Es probable, y se analiza en el entorno del senador, que a Basualdo le cueste el liderazgo político, pero tampoco esa teoría es contundente y suena más que nada a respuesta rápida. Otros dicen que juega para Gioja. El senador se enoja cuándo alguien dice eso, pero no puede evitar que el tema esté en la calle. Y algunos más dicen que es más empresario que político, aunque si fuese así, no gastaría tanto dinero en las campañas proselitistas. Puede ser alguna de esas afirmaciones, o una conjunción de ellas, nadie sabe. Y está, también, la acción del propio Gioja, que tiene en sus manos los recursos para que los intendentes flaqueen o no, según voluntad.

Conti, Ibarra, Colombo, Acosta y Cáceres, ¿tienen más votos que Monla y Castro? Veamos: el exbloquista no tiene ni partido político. El diputado nacional está bien en el nivel de conocimiento popular, pero su trabajo está en Buenos Aires, tocando temas que no llegan directamente al votante, lo que se traduce en un problema político serio. Colombo posee también un caudal importante de seguidores, a pesar de no haber ganado nunca una elección. Es un candidato eterno a todo lo que se le ponga enfrente, eso le baja imagen, seguro. Y Acosta y Cáceres no podrían, al menos hasta ahora, ganar una elección en una Unión Vecinal siquiera. Perfilan bien porque ambos se mueven en un nivel que le es esquivo al giojismo, pero no están listos para esta elección, sin dudas. Del otro lado Monla y Castro tienen un nivel de aprobación de gestión que supera el 50%, dicen en el oficialismo. Obvio, manejan municipios muy pequeños, y esa es su gran contra. El problema para Basualdo es que si sigue perdiendo adherentes, deberá salir él a hacer campaña por el candidato que salga de la interna, porque es poco probable que el resto de los competidores siga el viejo mensaje peronista de "El que pierde acompaña". En ese tren, la ayuda de los intendentes era vital, pero ya no están y deberá ser él quien se ponga al hombro el resultado de la elección que viene. En este contexto, que Marcelo Orrego salga a hacer campaña será vital, y seguro es una de las consecuencias de la partida de los jefes comunales al giojismo. Orrego mide casi tan bien como Basualdo y sería un desperdicio no aprovechar esos votos. Igual no está definido que el santaluceño salga ya que él no quiere, y habrá que ver qué dice Basualdo luego la partida de Castro y Monla.

Gioja hizo dos movimientos ya: el primero fue no meterse en la interna del Bloquismo y esperar a que Graciela Caselles resuelva sus problemas. Y el segundo fue seducir lo que pudo del basualdismo. No lo hizo en cualquier momento, lo hizo en el instante preciso, justo siete u ocho días antes de la presentación de listas, dejando casi inmóvil a su contrincante, siempre suponiendo que Basualdo no sabía de los movimientos.

Hace un par de semanas Basualdo dijo en una entrevista en Radio Sarmiento que tenía un as en la manga que todavía no mostraba. Toda la política sanjuanina espera que el senador haga su movimiento. ¿Lo hará?