Despejada la incógnita de los que se van a proponer como candidatos a la Presidencia y Vice de la nación, nos concentremos, en nuestra provincia, en quienes nos pedirán representación para la Cámara Baja del Congreso Nacional, dado que la renovación de senadores viene recién en 2021. Este año, el 10 de diciembre, vencen los mandatos de José Luis Gioja (PJ), Florencia Peñaloza (ahora electa diputada provincial para asumir justamente el 10 de diciembre por el PJ) y Graciela Caselles (Partido Bloquista aliado al PJ). Vistos los resultados tanto de las PASO primero como de las generales después, pareciera imposible que el PJ renueve las tres bancas, dado que se aplica el sistema de reparto proporcional D"Hont. En él es preciso que el primero triplique al segundo en cantidad de votos para obtener los tres escaños. Los dos últimos resultados fueron categóricos para el PJ de Uñac pero más o menos en la proporción 55 a 35, lejos de la diferencia necesaria para retener los tres lugares. De esa manera, cualquiera sea la figura que presente la oposición local (se estima que sería Marcelo Orrego), ganaría por lo menos el espacio de la minoría, es decir, una de las tres bancas, lo cual disminuiría en una la cantidad total de legisladores nacionales del PJ y aliados, hoy tiene 5 de 6. Mientras, Eduardo Cáceres, presidente del PRO, llegado al Congreso desde el desaparecido Cambiemos, tiene dos años más para pensar su futuro. En el PJ, el encabezado de la lista será por José Luis Gioja, forma necesaria para mantener el equilibrio interno al PJ y la gobernabilidad de la provincia. Tampoco tiene el frente Todos una figura con peso como para disputar el lugar al ex gobernador con la excepción del actual vice Marcelo Lima, quien ha declarado no tener interés. Llegando hasta aquí, nos quedaría solo una incógnita por despejar, la de la mujer. Se retiran dos, Graciela Caselles y Florencia Peñaloza. La segunda ya se abrió aceptando la candidatura a diputada provincial. Para Caselles confirmada para esa posición en el oficialismo el futuro es incierto. En una contienda fácil, con un resultado abultado para quien resulte ganador, es lógico que se arrastre a quien sea (la broma dice: "ponemos al Pato Donald y entra"), pero la de legisladores nacionales pinta para estar peleada y Caselles, por su sola figura, no arrima votos, sino lo contrario. Visto el reciente giro nacional, en principio parece mejorar la perspectiva de Macri y sus aliados con la llegada de Miguel Pichetto, referente histórico del PJ como que fue Presidente del Bloque del senado durante varios períodos. No tanto por los votos que pudiera allegar como vice sino por la certeza económica que agregó de inmediato al campo financiero. De seguir así, el horizonte de fin de mandato de Macri se ve mucho más estable y tal vez con mejoras visibles en lo económico. A nuestro modo de ver, se viene leyendo de manera errónea lo que está ocurriendo con las elecciones provinciales. Nuestra conclusión es que la gente está votando a los que ya están, es decir, a diferencia de lo que pasó en 2015 en que se justificó la marca Cambiemos como forma de interpretar el sentimiento general, este año ahora se prefiere seguir como se viene, íntimamente el votante se ha vuelto conservador.
¿Se puede dar por hecho que Gioja le ganará a Orrego? Los antecedentes de elecciones en que los candidatos a diputados nacionales quedaron despegados de todo interés provincial indican que su soledad fue muy grande. La cantidad de interesados en el resultado disminuye, ya no hay diputados provinciales, intendentes ni concejales que peleen por su propio interés y mucho menos eventuales ministros o funcionarios políticos del ejecutivo. En cuanto a Uñac, él ya ganó y ahora se podría sentar a ver cuánto mide Gioja por su sola cuenta. Por otra parte, Orrego, si bien perdió para gobernador, lo hizo desde un 35%, porcentaje alentador, combustible para otro destino y amenaza latente para cualquier adversario. Gioja contra Orrego, Orrego y Gioja puestos en una boleta vecina en el cuarto oscuro. Orrego con 44 años, Gioja con 70. Uno, dentro de la edad del grueso estadístico de los votantes, otro representando a la minoría que supera los 65. Otro elemento, Gioja ya no cuenta con la estructura que proporciona el ejercicio de un gobierno y Orrego aún tiene a la gente de Santa Lucía y a un 35% que lo votó sabiendo que no ganaría. En esta conjetura Graciela Caselles vería peligrar su posición lo cual no sería tan mal visto por el viejo partido de los Cantoni que viene reclamando a gritos una renovación de figuras, entre las cuales asoman Luis Rueda, Presidente de la Convención y Andrés Chanampa, diputado provincial. También aquí se plantearía un tema generacional.