El 21 de octubre, fue un día trascendental para San Juan. DIARIO DE CUYO publicó dos hechos muy importantes; en el primero de ellos, la decisión del cineasta y diputado nacional Pino Solanas de no asistir a un debate sobre minería, al que se lo había invitado, actitud que es propia de este tipo de personajes que primero tiran la piedra y después esconden la mano. Son muchas las personas como Solanas que se comportan de la siguiente forma: es decir no van con la verdad y con la razón, acudiendo al descrédito, el miedo, la mentira y la sospecha, para lograr de esta forma dejar instalada una causa.

El otro hecho al que me refiero es el de la habilitación de la nueva red de agua potable de la ciudad de Jáchal, con fondos de la minería que paradójicamente evitará que los ciudadanos de este querido y sufrido departamento, sigan tomando el agua contaminada por el arrastre del río, luego de hacerlo durante toda la vida.

Respecto de la actitud de Solanas hay que tener en claro que la mentira tiene patas cortas. Cuando las cosas se hacen correctamente, tanto en la acción, como en la comunicación, los resultados están a la vista. Es hora de actuar en pos de una causa, de lograr el bien común, de primar lo real sobre lo ideológico, y no confrontar.

Tanta es la mentira de estos seudos ambientalistas, que a diario vemos en cuanto acto hay sobre la minería. En la ocasión de la inauguración del acueducto brillaron por su ausencia. Si fuesen verdaderos defensores de las buenas condiciones de vida de la gente, deberían haber estado en primera fila, aplaudiendo esta gran obra con la que se solucionó la contaminación intrínseca del río Jáchal.

Cuánto hemos esperado que este señor Solanas tirara la toalla. Casi cuatro años y mientras tanto estuvo dedicado a sembrar duda, el desprestigio y la infamia. Cuando mucho mas fácil y honesto hubiera sido, de entrada, averiguar, enterarse de cómo se hacían las cosas, investigar y realizar un estudio serio. Pero no, fue mas fácil y seguramente mas redituable mentir, al mejor estilo Nazi: "miente, miente que algo quedará". De esta forma mantenemos engañados a un sin número de personas que todavía añoran ideologías perimidas del siglo pasado, alimentadas por los personeros del fracaso y hasta podría decir socios de las grandes potencias, para evitar el crecimiento de pueblos como el nuestro, que teniendo todo, no arriban y nunca llegan al desarrollo. Parece que dejarnos crecer es peligroso, ya que somos capaces de ser una potencia y estos personajes valiéndose de toda esta infraestructura, estrategia y fondos logran instalar la duda.

Recordemos la frase del Martín Fierro, "si nos peleamos entre hermanos nos devoran los de afuera."

Y este resultado demuestra, que cuando las grandes causas son apoyadas por el pueblo, el gobierno, los políticos, los intelectuales, las entidades intermedias, etc., todos juntos, logramos los grandes resultados.

Se ha ganado una importante batalla, pero no debemos dormirnos en los laureles. Estos personeros del Apocalipsis, lobos con piel de cordero, se mimetizan y volverán a atacar, pero recordemos con la verdad, el control, una causa justa y unidos, siempre saldremos airosos.