Los casi 150 casos de dengue registrados, hasta ahora, en ocho provincias han puesto a nuestro país en estado de alerta, ante la posibilidad de estar frente a una epidemia de esta enfermedad infecciosa provocada por la picadura del mosquito Aedes Aegypti.
Desde el Ministerio de Salud de la Nación ya se han emitido las recomendaciones necesarias tanto para el tratamiento como la prevención de la enfermedad, ante un panorama que se presenta complicado. El hecho de que mucha gente esté viajando a zonas de brote del virus; existan amplias áreas inundadas en la zona del Litoral y centro del país, y que no se tengan en cuenta las normas básicas de limpieza e higiene, como también el destino de residuos y desechos en los que proliferan los mosquitos, hace muy difícil el control del virus que es de fácil transmisión.
Hasta ahora se han detectado casos en Formosa, Misiones, Santa Fe, Salta, Catamarca, Entre Ríos, Córdoba y Buenos Aires. En la mayoría de los casos se trata de dengue no autóctono, lo que ha generado mayor temor a una epidemia.
Si bien nuestra provincia, hasta ahora, no figura en la lista de zonas afectadas, las recomendaciones hay que cumplirlas ya que hay datos que confirman que el dengue está latente en toda la región.
Determinar los lugares de nuestra provincia donde los mosquitos del dengue pueden proliferar debería ser a partir de ahora prioritario. No debemos olvidar que el Valle de Tulum es un gran oasis, donde abundan obras para el almacenamiento de agua realizadas por el hombre, al igual que lagunas y vertederos de residuos que no cumplen con pautas básicas que garanticen la no proliferación del insecto.
Las zonas rurales deberían concitar una atención especial ya que pueden resultar las más afectadas por sus propias características y el estilo de vida que tiene su gente. En este sentido sería conveniente implementar tareas de fumigación terrestre y aérea, para llegar en forma efectiva hasta los rincones más inaccesibles. De la misma forma, intensificar las campañas de prevención y educación referidas a este flagelo que amenaza con extenderse a todo el país.
La población debe tomar conciencia del peligro de esta posible epidemia y la necesidad que existe de contrarrestarla para que no avance hacia un ámbito de donde luego costará erradicarla.
