El término Ético proviene del griego "Ethos” que significa costumbre, y Moral del italiano "Morale”: Ciencia o doctrina de las conductas o procederes de las acciones humanas de acuerdo a su bondad o malicia. De manera tal que en la práctica debemos considerar que representan casi lo mismo. Pero no sucede así bajo el punto de vista filosófico. Por moral hay que entender un conjunto de normas o costumbres que rigen la conducta o proceder de una persona, para que pueda considerarse buena o mala; y la ética reflexiona qué se entiende por conducta buena -en este caso-, es decir moralmente valiosa y en qué se fundamentan los juicios morales.

 

Éstos, que forman parte de la vida humana, son, por ejemplo, la cristiana, musulmana, evangelista, confucionismo, budismo etc. y se aceptan tales como son. Mientras que la ética tiende a generalizar principios y exige una fundamentación. Es decir, la ética es a la moral lo que la teoría es a la práctica. La moral es un tipo de conducta y la ética es una reflexión filosófica que busca entender cuál es su naturaleza en el plano del análisis de los conceptos, y es cuando nos preguntamos ¿Qué es lo bueno? y trata además problemas como: ¿Es preferible sufrir la injusticia o es preferible cometer injusticia? El concepto de bueno es el problema central de la ética y es difícil definir. Es aquí cuando aparecen las distintas corrientes filosóficas de autores como Kant, Moore, Aye, etc.

Algunos autores afirman saber qué es bueno o malo mediante una intuición, sin necesidad de razonar. Otros sostienen si algo es bueno o malo dependiendo de los gustos personales, de los consejos recibidos, del medio ambiente donde se han formado, de la educación recibida etc. Pero hay otra teoría que dice que algo, por ejemplo, es bueno porque todos dicen que es bueno, y si es malo, porque todos dicen que es malo, y llega a imponerse como una norma: en este último caso, masticar o hablar con la comida en a boca, apoyar los codos en la mesa etc. Otra teoría dice, también como ejemplo: "No matarás”, de manera imperativa. Y, si alguien se pregunta ¿Por qué?, esta teoría responde: porque hay que respetar la vida de los demás. ¿Por qué?, porque la vida humana se considera un valor supremo universal; o sea, "no matarás” es una norma universal. Lamentablemente, en este caso, dicho concepto es simplemente filosófico, porque en la práctica nunca se han llevado a cabo. Por todo lo escrito sabemos que hay diversos tipos de ética que los filósofos bien lo saben: Intucionismo, Emotivista, Normativa, etc.

De todas maneras y en todos los casos, la moral necesita una justificación filosófica, y en definitiva aceptar que la moral y la ética deben ir juntas, porque es la base para exaltar la sapiencia y dignidad del ser humano. No puede haber ética si no existe la moral, y no es completa una moral si no va acompañada por la ética.