Este fin de semana, como ocurre en el mes de mayor tránsito vehicular del año debido al recambio turístico en plena temporada alta, las rutas que llevan a las zonas del país con mayor concurrencia de visitantes, se verán congestionadas con el riesgo que ello implica.

De acuerdo a lo anunciado oficialmente, se cumplen distintas campañas preventivas para ordenar la masa de rodados que se desplazan desde y hacia los lugares citados, comenzando con la prohibición de la circulación de camiones, salvo casos de fuerza mayor por transportar alimentos e insumos imprescindibles. Pero lo que debe destacarse como muy positivo, son los operativos de control implementados por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y la Comisión Nacional Reguladora del Transporte (CNRT). Estos organismos intensificaron desde ayer los controles de alcoholemia, de verificación de la documentación y de los elementos de seguridad del vehículo, como también del correcto funcionamiento de los limitadores de velocidad que se exige a los ómnibus de larga distancia y a las combis de pasajeros.

En ese sentido, desde hace casi un año, la ANSV y la CNRT realizan un trabajo conjunto para observar la colocación de dispositivos que limitan la velocidad máxima a 100 kilómetros por hora y, según lo informado por estos entes, ya alcanzó al 98% del transporte interjurisdiccional de pasajeros. Además, si hay un buen funcionamiento de elementos de seguridad como matafuegos, al menos dos ventanas rompibles, dispositivos de liberación de puertas y escotillas de emergencia en el techo, junto con los controles de alcoholemia, suman un marco de tranquilidad. Si una tragedia es evitable, no puede catalogarse de accidente.