Un nuevo informe de las Naciones Unidas pronostica una caída de alrededor del 40 por ciento en las inversiones extranjeras en Latinoamérica en 2009. Ojalá me equivoque, pero me temo que podría ser mayor. La Comisión Económica para América latina y el Caribe (Cepal), dice que la inversión extranjera en la región creció un 13% en 2008, tras un aumento del 52% en 2007, para alcanzar una cifra récord de 128.000 millones de dólares.

Eso se debió fundamentalmente al aumento mundial del precio de las materias primas, que permitió un rápido crecimiento en Sudamérica.

Mientras la inversión extranjera creció el año pasado un 24% en Sudamérica, bajó un 5% en México y Centroamérica, dice el estudio. México fue especialmente afectado por la recesión de Estados Unidos, que hizo disminuir las inversiones y el turismo, reduciendo en un 20% en las inversiones foráneas en este país. Por su parte Trinidad y Tobago y la República Dominicana, experimentaron un aumento de las inversiones externas del 201 y del 83 por ciento, respectivamente. El 80% de las inversiones externas en América del Sur se concentró en tres países: Brasil, Chile y Colombia. Brasil fue por lejos el mayor imán de inversiones.

El año pasado el 61% de las inversiones fue a países desarrollados, mientras un 21% se radicó en Asia, 8% en Latinoamérica, 6% Europa del Este y 4% en Africa. Muchas inversiones en Latinoamérica fueron el resultado de compromisos sellados antes del inicio de la crisis económica global. Para 2009, estas inversiones caerán entre 35% y 45% en la región.

Cuando le pregunté a la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena, como esa institución llegó al pronóstico de 2009, me dijo que el estimado se basa en proyecciones de los bancos centrales de Brasil, México y Chile. "Brasil y México, por su tamaño, marcan la pauta de la región", según Bárcena.

Basándose en datos del primer trimestre, Brasil y Chile tendrán una caída de 45% en las inversiones externas este año, y México calcula una disminución de 31%, agregó. En su pronóstico, la Cepal no toma en consideración factores políticos tales como el posible aumento de la inestabilidad económica o la falta de seguridad jurídica en algunos países.

Mi opinión: Si algunos gobiernos no hacen algo para moderar su discurso y mejorar el clima de inversión, las inversiones externas caerán aún más de lo pronosticado, especialmente en países que se ven como hostiles a los inversores.

Las informaciones de estos días sobre nacionalizaciones en Venezuela de subsidiarias de Cargill y Techint, entre otras inversiones extranjeras, harán crecer los temores de que otros países adopten medidas similares a medida que sus economías se debiliten.

También el clima de negocios de la región no está siendo bien visto comparado con el de otras partes del mundo. Un ranking de competitividad entre 57 naciones publicado la semana pasada por la escuela de negocios IMD de Suiza revela que, mientras EEUU, Hong Kong y Singapur ocupan los tres primeros lugares, Chile se sitúa en el puesto 25, Perú en el 37, Brasil en el 40, México en el 46, Colombia en el 51, Argentina en el 55 y Venezuela está en el 57, casi cayéndose de la tabla.

Además, habrá casi una docena de elecciones presidenciales en Latinoamérica en los próximos dos años, y estudios de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OECD) revelan que la inversión tiende a caer significativamente en la región en épocas electorales. Temen que los nuevos gobiernos cambien las reglas de juego.

Es que en un período en el que las inversiones extranjeras reducen debido a la crisis económica, los inversores se irán a los lugares más seguros. Así como algunos países se dieron el lujo de ser populistas gracias al alto valor de sus materias primas, ahora tendrán que ser más amigables con los empresarios y más competitivos a nivel internacional para atraer inversiones extranjeras. Si no lo hacen, la caída del 40% pronosticada por la Cepal se quedará corta.

"LA REALIDAD es que, en un período en el que las inversiones extranjeras se están reduciendo debido a la crisis económica, los inversores se irán a los países más seguros."