Es difícil saber qué va a pasar en Venezuela, pero lo que me dijo el presidente colombiano Juan Manuel Santos en una entrevista esta semana debería hacer sonar las alarmas en todo el continente.

Santos dijo, durante una visita a Miami, que la Asamblea Constituyente elegida a dedo por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, está redactando una nueva Constitución que se haría pública después de las elecciones presidenciales del 20 de mayo en Venezuela. Según Santos, la nueva constitución convertiría oficialmente a Venezuela en una dictadura como la de Cuba.

 

Venezuela y Cuba unidos por lazos históricos y de política internacional.

 

 

Maduro, que ya es un dictador de facto, se está postulando para la reelección. Ha prohibido que los principales líderes de la oposición compitan contra él, no permite observadores electorales internacionales y se ha negado a crear un tribunal electoral independiente.

Estados Unidos, la Unión Europea y todos los principales países de América Latina han dicho que no aceptarán los resultados de la farsa electoral de Maduro.

Santos me dijo que la Asamblea Constituyente de Maduro está redactando en secreto una nueva Constitución de 350 artículos y 18 "cláusulas transitorias" que crearían un sistema de votación de estilo cubano. En Cuba, las "organizaciones de masas" controladas por el régimen eligen a los funcionarios locales que a su vez eligen a los legisladores, y estos a los líderes del país.

"La información que yo tengo es que entre esos artículos (de la planeada reforma constitucional) está por ejemplo abolir el sufragio universal y establecer un sistema muy parecido al de Cuba, en que las elecciones son una especie de elecciones corporativas", dijo Santos.

Santos agregó: "También tengo entendido que van a establecer una serie de modificaciones en cómo se define "traición a la patria”… para tener más instrumentos supuestamente legales para poder reprimir a la población".

Cuando le pregunté de dónde obtuvo esa información, Santos dijo que viene de "informes de inteligencia", sin dar más detalles.

Maduro podría radicalizar su revolución izquierdista para evitar una rebelión popular a medida que el país desciende a un caos casi absoluto. El Fondo Monetario Internacional proyecta que la hiperinflación en Venezuela este año puede llegar al 13.000 %, y hay una escasez generalizada de alimentos y medicinas.

"Cuanto más se deteriora la situación económica y social, más sofisticada es la forma de reprimir a la población", continuó Santos. Venezuela está creando células paramilitares locales para tratar de controlar cualquier tipo de disidencia, dijo.

Debo confesar que soy instintivamente escéptico cuando los presidentes citan "informes de inteligencia", porque a veces estos están escritos por expertos en desinformación que buscan desprestigiar a sus enemigos. Pero en el caso de Venezuela, hay razones para tomar en serio las declaraciones de Santos.

A menos que se pueda presionar a Maduro para que abandone sus planes totalitarios, pronto podríamos ver a millones de venezolanos más huyendo del país, y una crisis migratoria regional como no se ha visto en la historia reciente del continente.