El terremoto de San Juan de 1944 marcó a generaciones de sanjuaninos. El calendario se encarga de recordar la fecha y la hora de esa tragedia cuando todo se comenzaba a mover, a destruirse. No solo edificios y viviendas construidas de adobe, sino de familias que se vieron mutiladas por la pérdida de seres queridos, amigos y vecinos. El día trágico fue el 15 de enero de 1944 a las 20:52 horas. El epicentro se localizó a 20 kilómetros al norte de la ciudad de San Juan, en el departamento de Albardón. La magnitud del tremendo sismo fue de 7,4 grados en la escala de Richter.
San Juan sufrió las consecuencias del poder de la naturaleza que enlutó a todo el país. El terremoto destruyó alrededor del 80% de las construcciones de la ciudad, incluyendo edificios públicos e industriales.
Según los datos oficiales y periodísticos de la época, se estima que el terremoto causó la muerte de unas 10.000 personas, una cantidad indeterminada de desaparecidos y miles de heridos.
La ayuda que no tardó en llegar desde Mendoza
Miles de de historias se contaron a partir de esa luctuosa experiencia. Los médicos y enfermeros mendocinos que hicieron lo imposible por llegar a San Juan, con caminos precarios y el tendal de escombros y personas que no podían creer lo acontecido. También la ayuda llegó desde Chile, con voluntarios médicos y con el transcurrir de las horas con todo el país tratando de ayudar.
Es que el terremoto fue tan fuerte que se sintió en varios lugares del país como Mendoza, por eso la presurosa ayuda de los hermanos cuyanos que fueron al rescate.
Este terremoto fue el más mortífero de la historia argentina. La tragedia tuvo un impacto social y cultural profundo, y modificó la dinámica social y económica de la región.
La reconstrucción
La reconstrucción de San Juan fue un desafío monumental. Se estableció un Consejo de Reconstrucción que se centró en la construcción de edificios resistentes a sismos y en la reconfiguración urbanística de la ciudad. El terremoto también llevó a la creación del Sistema de Prevención de Catástrofes Naturales (SIFEM) en Argentina.
En síntesis, un sismo que marcó la historia del pueblo de San Juan, que siempre debe estar atentos ante este tipo de eventos naturales. Además, enseñó a estar prevenidos de tener a mano un botiquín de primeros auxilios, linterna, agua para tener a mano y salvarse de cualquier desastre que pudiera provocar un terremoto.
Por José Correa
DIARIO DE CUYO