Señor director:

Algunas abuelas son un cúmulo de experiencias vividas. Un cofre de historias guardadas, con un corazón tan fuerte, que pudieron resistir todas las tormentas, no solo familiares, sino en el contexto que la sociedad vivía. Estuvieron al pie del cañón, y aún están dispuestas a ayudar, soportar y emitir un consejo adecuado. Esas abuelas no dimitieron ante el “no te metás”, “no hagás”,”dejá”… de este presente, con la actual generación, tan poco interesada en el otro.

Ella perteneció a otra formación, donde “la mano se daba”, porque era un contexto de carencias, de creatividad y hogar. Donde el esfuerzo, el “no tirar” y el amor a la familia “se mamaba” porque siempre estaba en primer lugar.

Siempre fueron nobles, sensibles, pilares de la familia y tienen apoyar a nietos y bisnietos con valores morales. Me pregunto “¿estarán equivocadas? o son el baluarte de épocas pasadas?

Beatriz del Alba