¡Qué honor haber heredado nuestro idioma castellano! No poseemos el "tono bello" de aquellos de Castilla la vieja que pronuncian perfecto, con suavidad y gracia los versos de Unamuno, Lope de Vega y poetas avezados. Ocurrió algo grave. Es tan grande la ignorancia en nuestra Argentina hoy gobernada, que hasta aquí, la Universidad Nacional de San Juan apoyó el denigrarla. Nuestra lengua heredada, la lengua de nuestros ancestros. La que en la Constitución Nacional está con orgullo allí aceptada. No respetar ni lo bueno. ¡Qué horror! ¡Fui para hablar hasta al rector! Le dejé mi nota publicada. No me escuchó ni abrió puertas. Y yo que he pasado por la Universidad (profesora muchos años) lloré lágrimas al ver cómo se ha politizado.

Estas simples palabras son para honrar nuestra lengua deshonrada, nuestro idioma castellano el que tiene vuelo con gracia, suavidad de la paloma o fortaleza de sabio cuando es bien pronunciado.

Los escritores se lucen y te atrapan gracias a ella, al ser bien usada. Y el periodista y el locutor bien entrenado seduce a la audiencia por la voz y la "palabra bien empleada".

No me gusta ni nombrar esta "moda implantada" como lo es el llamado "lenguaje inclusivo", el que hiere, el que lastima y más en boca de profesores politizados con sello kirchnerista.

Beatriz del Alba