Noto cierta pasividad tanto a nivel nacional como provincial, ante los acontecimientos de la crisis por el cambio climático. A nivel provincial no se ven campañas para mantener limpia las acequias, porque cada vez que nos sorprende una lluvia, las calles se inundan y no hay drenajes. También sería bueno que se haga algo con los cables aéreos, porque ya se cayeron muchos postes de energía eléctrica, cuando hubo viento Sur con ráfagas de hasta 94 km/h hace un par de meses. Tampoco se hacen campañas con medidas preventivas ante la escasez de agua o cómo obtener energía solar en cada hogar ante situaciones de emergencia. Y, sobre los sismos, ya no se hacen campañas de prevención a nivel masivo, no sólo en las escuelas primarias y de vez en cuando, sino que se hace necesario que la población de todas las edades pueda salvar su vida, porque, llegado el caso, no se puede tener a un bombero, un médico o un policía por cada habitante . Creo que no debemos esperar que suceda una catástrofe para lamentarnos. Tanto organismos oficiales como ONGs deberían estar trabajando juntos para llevar un mensaje a toda la comunidad. Prevenir puede salvar vidas.

Por Humberto Gutiérrez
DNI 8.092.845