Mucho hay para decir del movimiento literario de Caucete. Cada día hay mucho por descubrir. Todo comenzó allá por 1997 y sigue en pleno crecimiento. Están aquellos que lograron con mucho esfuerzo publicar sus obras, en mayor parte libros de poesía, como quienes esperan que sus trabajos vean la luz. En este contexto de expresión cultural, por medio de la pluma y la palabra, salieron y salen a la luz crisis personales propias del común de la gente. En las que el escribir y rodearse de escritores, sirvió como bálsamo para curar heridas del alma a muchos de ellos. Entre estos orfebres de la palabra está Ana María Cresto. Ella escribió "Historias de remembranzas de amor I y II”. Esta mujer de 80 años estaba casada con un hombre que la maltrataba. "Entre libro y libro de su autoría, su marido falleció y esta vez, al leer su segundo trabajo, se la veía como otra persona. Se la veía sonriente, libre de dolores que padeció en su corazón. Como si esto fuera poco, el domingo pasado fue la presentación de la segunda parte en la Biblioteca Colón, e esta escritora caucetera, que vive ahora con sus hijos en Córdoba y quiso presentarlo en su Caucete querido.

"La escritura y el ambiente literario de sus colegas, le sirvió a Ana para recuperar su autoestima”, contaba otra escritora, Miriam Fonseca. Es que "mediante la literatura, la poesía, muchas personas de distintas edades que se acercan, expresan sus experiencias de vida y logran en el ambiente literario, un espacio de contención social y hasta de sanidad del alma.