Muchas veces la emergencia suele estar a la vuelta de la esquina. Es entonces cuando aparece el servidor público. Y, entre ellos, se yergue la figura del bombero voluntario. Aquel que lo mueve su vocación de servicio por su comunidad. El pasado 2 de junio se celebró el día de estos trabajadores solidarios. En San Juan, hay varios cuarteles de Bomberos Voluntarios. Están en Capital, Albardón, Iglesia, Valle Fértil, Rawson, Caucete, Santa Lucía y Bomberos Voluntarios de la Provincia de San Juan con sede en Chimbas. Todos cumplen una destacada labor acudiendo de forma inmediata a los llamados de emergencia de los sanjuaninos. Sin embargo, siempre están en la lucha de las carencias de equipos necesarios para combatir cualquier clase de siniestro, no solo incendios. Por tal motivo siempre es bueno el hecho de colaborar con ellos, en especial con los cuarteles que están en el departamento donde sus vecinos residen. Cabe recordar que ayer fallecieron dos bomberos en Capital Federal que si bien pertenecían a la Policía de la Ciudad, también eran servidores. La historia dice que el 2 de junio de 1884 se produjo un voraz incendio en el barrio porteño de La Boca. Fue entonces que un vecino, llamado Tomás Liberti y su hijo, organizaron, junto a un grupo de personas del barrio, una cadena humana para apagar las llamas que amenazaban propagarse en las construcciones aledañas. Así fue como este suceso dio nacimiento a la creación del primer Cuerpo de Bomberos Voluntarios. En la actualidad, Argentina cuenta con más de 43.000 bomberos voluntarios, de los cuales 7.000 son mujeres, distribuidos en más de 900 cuerpos en todo el país. 

Redacción
DIARIO DE CUYO