Señor director:

A través de esta nota quiero rendir mi homenaje a un grupo de Bioquímicos que fallecieron en los últimos 14 meses. Sobre fines del 2015 fallece el Dr. Antonio Sabino Montión, un bioquímico muy solidario y presente hasta en las pequeñas cosas. En los primeros meses del 2016, dos socios fundadores del Colegio Bioquímico de San Juan, el Dr. Walter Gahona y el Dr. Humberto Sistema, un activo dirigente de la institución.

En el mes de marzo, el Dr. José Sirerol, que en lo personal me unió un gran afecto y eterno agradecimiento porque fue la primera persona que me ofreció su ayuda profesional cuando ingresé como Bioquímico Ad Honorem al Laboratorio del Hospital Marcial Quiroga allá por el año 1982.

Posteriormente en forma inesperada, cuando nada hacía suponer lo ocurrido, nos dejó la Dra. Mabel Ríos, una bioquímica joven de una vida muy participativa y activa dentro de la actividad profesional.

En una mañana del mes de agosto, el Dr. Adrián Berbari, un bioquímico muy activo y actualizado en la profesión. Con él tuve la suerte de compartir cursos de actualización fuera de la provincia y nos reíamos mucho de sus ocurrencias como de sus anécdotas de la pesca.

Y cuando todos estábamos esperando disfrutar de este último fin de semana largo del año, el Dr. Gerardo Méndez, también un bioquímico muy luchador, con una intensa actividad dentro del Colegio Bioquímico, con quien también me unía un gran afecto personal.

Ellos ya no están presentes en esta vida terrenal, existe el dolor de su ausencia, tanto en sus familias como en los colegas que los hemos frecuentado. Pero estoy convencido que por su forma de ser, por la huella que dejaron estarán siempre presente en nuestros corazones.