Señor director:
La gratitud en silencio no sirve a nadie. Cuando públicamente se da a conocer en un ejercicio de la mente, es lo más bello cuando brota del alma. Más si es por valoración, reconocimiento y desempeño en actos heroicos, como es en este caso, destacaré de las personas que actuaron en la línea de fuego en la atención de sus semejantes, atacados por la pandemia del coronavirus. Médicos, bioquímicos, enfermeros, camilleros, personal de maestranza, personal todo que está en la línea de fuego, con una actitud heroica, que debe reconocerse. Ellos tienen una capacidad sobresaliente para enfrentar los peligros en esta adversidad, aunque algunos no lo entiendan. Han tenido y tienen grandeza de alma, valentía y lucha denodada por defender la vida. Así los médicos han sido fieles a su juramento y al mandamiento de "Amar al prójimo como a sí mismo”. Nosotros debemos ser como escudos, para detener el viento del olvido, que quiera borrar los nombres de las personas que estuvieron en la primera línea en nuestros históricos y queridos hospitales y escribieron una página brillante en la historia de la Medicina de San Juan.
Leonor Paredes de Scarso
Profesora de Historia
