Señor director:

Cuando se observan por televisión conductas de políticos y militantes de distintos sectores, siento que necesitamos más y más educación en nuestra Argentina. Entonces veo que la figura del Gran Maestro de América, Domingo Faustino Sarmiento, se agiganta. Siento también la necesidad de que en cada hogar, los padres sean más responsables con sus hijos y enseñen valores. Que la honestidad sirve y siempre nos lleva a buen puerto. Que la solidaridad nos ayuda a construirnos como personas y ciudadanos. Que con amor genuino podemos salir adelante en todo y ser personas exitosas, ya que, según dicen las escrituras: "Dios es amor". Que se puede formar una familia y transmitirle a sus miembros la cultura de la educación, el trabajo y amor al prójimo.

Creo que si comenzamos desde ahora con la enseñanza de valores y más educación, desde el hogar y en la escuela, podemos dejar rápidamente de lado a quienes utilizan la política como beneficio propio.